La Fórmula 1 está de cumpleaños, se nos hace mayor, pero es eterna, inmortal. Nuestra Fórmula 1 nació un 13 de mayo de 1950 cuando se llevó a cabo el 1er Gran Premio oficial, en Gran Bretaña, en el circuito de Silverstone. Era un campeonato con apenas 7 carreras, en donde participaban los principales fabricantes de automóviles, alfa romeo, Ferrari, Maseratti, Mercedes…

La Fórmula 1, denominada la “categoría reina del automovilismo” por su evolución tecnológica y referencia a nivel mundial, donde compiten los mejores pilotos del mundo, con las mejores marcas automovilísticas (aunque en la actualidad esto ha cambiado), es para mí más que un deporte, es un estilo de vida. Puede sonar exagerado, porque solo llevo viéndola desde el año 2007, no soy experta y no entiendo muchas cosas, pero la pasión que siento por ella me hace indagar y siempre buscar más allá de lo que nos enseña la televisión con la finalidad de aprender cada día más.

¡Cuántas anécdotas podrían contarnos las personas que la han visto desde su creación! La época clásica de Juan Manuel Fangio, las peleas míticas de Senna-Prost, las carreras de Gilles Villeneuve, la era victoriosa de Schumacher, también como todo, las desgracias que han sucedido, las lágrimas que se han derramado, los ídolos que se han llorado y pare usted de contar, por mi corta edad no conozco tantas anécdotas para seguir poniendo como ejemplos. Pero por todo esto, por las cosas que he leído, que me han contado, considero que la F1 es algo más que especial, no es solo ver los autos “correr en círculos” durante dos horas, es sentir como si se estuviera allí corriendo con el piloto, y apoyando a ese equipo con el que te sientes identificado por distintas razones, o simplemente admirar el ingenio humano, lo que los hombres son capaces de hacer.

Esta es una de las partes más bonitas de este deporte, que no solo depende del esfuerzo físico, es más eso es sólo una infinitésima parte de esto, la F1 depende principalmente de la inteligencia humana, es lo que la diferencia con deportes como el tenis, fútbol, atletismo, los cuales se necesita inteligencia, pero en la F1 lo principal es la capacidad de crear, ¿qué hace un piloto sin auto? Nada, no sería automovilismo, sería atletismo, correr sin auto, y el auto es creación humana, en donde se pone a valer la ingeniería, en donde se pone a funcionar el cerebro. La Fórmula 1 es estrategia, por eso requiere de un grupo especializado dispuesto para esto, es como la guerra, el mejor y más inteligente gana.

Los fans también aprendemos con todo esto, cuántos niños no han querido ser ingenieros debido a su admiración por la F1, y muchos aficionados que son autodidactas para entender más sobre este mundillo, otros la sienten desde un punto de vista más sentimental y otros más fanático, lo importante es que todos la aman. No nos importa madrugar, sacrificar reuniones sociales, no dormir con tal de ver las carreras, y apoyar a los nuestros. Muchos con más suerte apoyan desde los circuitos, pero todos somos los mismos, la F1 nos une, y ahora con las nuevas tecnologías aún más, con las redes sociales no importa de que país seamos, igualmente estamos unidos.

Por eso, en su 63 cumpleaños quiero darle las gracias por hacerme feliz, aunque yo apenas lleve 6 años viéndola, espero que en 63 años más esté contándole a mis nietos o bisnietos lo emocionante que eran ver las carreras, y espero que en ese futuro ellos también la vean, porque la F1 será eterna, y evoluciona con el tiempo, de eso no hay duda.

Feliz cumpleaños Fórmula 1, que sean muchos más.