01-03-2014, 16:47
FERNANDO el 28/2/2014
"Diría que no hay diferencias enormes en la gestión de la distancia de carrera: sin entrar en demasiados detalles, puedo decir que muchas cosas permanecen invariables.
El año pasado tuvimos que saber gestionar los neumáticos desde la primera vuelta y este año es lo mismo, con el añadido de que el coche parece más lento por el menor nivel de carga aerodinámica con la que contamos y por el peso, que ha aumentado.
Además hay que gestionar el consumo de gasolina y las baterías.
Por tanto, hay pocos grandes cambios, si bien el tiempo empleado para completar la distancia de carrera aumentará inevitablemente.
Probablemente las mayores diferencias que se verán este año serán entre la carrera y la clasificación, porque el sábado se podrá empujar de verdad.
En lo referente a la conducción, el nuevo motor requiere algunos cambios en el estilo de pilotaje, tanto en las curvas, como en las rectas.
La principal diferencia está en la distribución de la potencia, que es más repentina y menos progresiva.
Tenemos que aprender a entender el comportamiento del coche en función de esa distribución y será necesario casi anticipar las reacciones, porque se intuye cómo se comportará en ciertos puntos: en líneas generales, es un poco más difícil de conducir, de manera limpia y precisa.
En las rectas las sensaciones también son distintas. El año pasado tuvimos un KERS que nos daba 80 caballos más, este año tenemos 160 extra y se puede sentir realmente el empuje".
"Diría que no hay diferencias enormes en la gestión de la distancia de carrera: sin entrar en demasiados detalles, puedo decir que muchas cosas permanecen invariables.
El año pasado tuvimos que saber gestionar los neumáticos desde la primera vuelta y este año es lo mismo, con el añadido de que el coche parece más lento por el menor nivel de carga aerodinámica con la que contamos y por el peso, que ha aumentado.
Además hay que gestionar el consumo de gasolina y las baterías.
Por tanto, hay pocos grandes cambios, si bien el tiempo empleado para completar la distancia de carrera aumentará inevitablemente.
Probablemente las mayores diferencias que se verán este año serán entre la carrera y la clasificación, porque el sábado se podrá empujar de verdad.
En lo referente a la conducción, el nuevo motor requiere algunos cambios en el estilo de pilotaje, tanto en las curvas, como en las rectas.
La principal diferencia está en la distribución de la potencia, que es más repentina y menos progresiva.
Tenemos que aprender a entender el comportamiento del coche en función de esa distribución y será necesario casi anticipar las reacciones, porque se intuye cómo se comportará en ciertos puntos: en líneas generales, es un poco más difícil de conducir, de manera limpia y precisa.
En las rectas las sensaciones también son distintas. El año pasado tuvimos un KERS que nos daba 80 caballos más, este año tenemos 160 extra y se puede sentir realmente el empuje".