12-04-2012, 09:26
Vale, tenemos un mal coche y posiblemente no ganemos ni esta carrera ni el campeonato ¿y qué?. Tenemos al mejor piloto que nos está dando año tras año, carrera tras carrera, lecciones de pilotaje. Nos está permitiendo disfrutar de unas carreras excelentes, está demostrando incluso a los más duros con él, los ingleses, que es el mejor y lo reconocen públicamente, aunque a regañadientes. En los últimos tiempos hemos estado viendo cómo en todos los países extrangeros (inglaterra y alemania también) se rinden públicamente a Fernando y lo reconocen como el mejor, se quedan asombrados por sus carreras e incluso últimamente lo comparan con Senna. Y nosotros, los españoles, como siempre, sólo estamos satisfechos si gana. Claro que nos gustaría más que tuviese un buen coche y ganase, pero yo estoy disfrutando tanto o más que en el 2005 y el 2006. Desde que llegó a Ferrari está haciendo unas carreras antológicas, que cuando pasen unos años se recordarán como se recuerdan las del gran Gilles, las de Prost o las de Senna. Se hablará de la carrera que hizo con el cambio de marchas estropeado y la forma atípica con la que tuvo que pilotar (y darse cuenta en plena carrera), de la carrera donde massa tuvo un problema en la clasificación y se quedó con el coche parado al írsele todo del volante, y a Fernando le pasa lo mismo en la Q2, le mandan regresar a boxes y él tiene la sangre fría de yendo al límite en una vuelta de clasificación, no desconcertarse y decirles a los ingenieros que va en vuelta buena y que mejor termina la vuelta para pasar a la Q3 (así al menos ellos tenían más tiempo para arreglar lo que le pasase al coche y si no podían saldría el 10, no el 15), o esta última carrera, sin un solo fallo, con un coche muy inferior al de muchos que son considerados grandísimos pilotos, y ganarles, sin desconcertarse, y eso que tampoco tenía telemetría y tenía que además de pilotar al máximo, controlar a Sergio e ir dictándoles a los de boxes la telemetría que salía en su volante minuto a minuto. Es decir que tenía que ir mirando casi contínuamente el volante
ALONSO ES LA DESCRIPCIÓN DEL PILOTO PERFECTO.
Allí dónde el amor venza al miedo, solo allí nos encontraremos.
Allí dónde el amor venza al miedo, solo allí nos encontraremos.