26-12-2010, 10:20
Ya tu pluma no escribre.
Cómo te recuerdo madre,
en la tenue claridad de un candil aletargado
tus ojos bajo el cristal con mirar hipnotizado
deshojando algún desmadre,
y al buscar que todo cuadre
en metro, rima y cadencia cuando un poema has creado,
con tu mente pura y fresca, que jamás has terminado
hasta ajustarle en su encuadre.
Tu pluma siempre está llena de la sangre de un tintero
que gota a gota describe
los sueños y las vivencias que has dejado en el sendero
pero jamás te recuerdo componer algo proclive
que llore en tu lapicero.
Y tengo guardada, madre, tu pluma que ya no escribe.
Damita
Cómo te recuerdo madre,
en la tenue claridad de un candil aletargado
tus ojos bajo el cristal con mirar hipnotizado
deshojando algún desmadre,
y al buscar que todo cuadre
en metro, rima y cadencia cuando un poema has creado,
con tu mente pura y fresca, que jamás has terminado
hasta ajustarle en su encuadre.
Tu pluma siempre está llena de la sangre de un tintero
que gota a gota describe
los sueños y las vivencias que has dejado en el sendero
pero jamás te recuerdo componer algo proclive
que llore en tu lapicero.
Y tengo guardada, madre, tu pluma que ya no escribe.
Damita
“Como piloto, vivir esta experiencia colma muchas de nuestras satisfacciones”.