27-01-2011, 09:43
Hay novelas que uno las empieza a leer, desea seguir devorando sus`páginas por la intensidad de su relato,, consigue que el lector no pueda incluso dejar de leer, lo de menos es que la Hª sea real o no. Reconozco que cuando leí los dos primero me supo a poco, pero sinténdo mucho el escritos Castellaá ha ido perdiendo intensidad poco a poco en su relato, no deja de usar tópicos y reflejar a los protagonistas de una forma deslavazada y poco creíble, con argumentos un tanto inconexos. Al final de esta historia, personalmente me daba igual que lo planteado fuera real o no, nunca lo sabremos con seguridad, lo triste para mí o quizás para él es que no puedo opinar a partir del punto 4 porque consiguió que cuando llegué al final del punto 3 la historá dejó de interesarme. Siento decirle al Sr. Castellá que como novelislta no se ganaría la vida y eso que en este caso a la trama no le faltaba nada, sáolo había que ilvanar los detalles con un pooco de buen hacer para que tuviera exito.
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