26-06-2012, 11:21
(Este mensaje fue modificado por última vez en: 26-06-2012, 11:50 por German Sanchez.)
Los insultos que vienen de amigos o gente que aprecias duelen. Los que vienen de gente que ni fú ni fá, para mí son un halago, porque me alejan más aún de ellos.
No digo más.
No digo más.
Siempre con Fernando, año tras año.
Un imbécil que lee mucho no reduce un ápice su imbecilidad. Si acaso, se convierte en un imbécil leído.