14-02-2011, 21:08
(Este mensaje fue modificado por última vez en: 14-02-2011, 21:10 por gasolina.)
"Hubiera podido ser gregario de ciclismo"
Si gana un gran premio repite hotel, habitación, cena... ¿Se acuerda de todo?
Sí, sí que me acuerdo.
¿Es verdad que antes de la carrera canta un rito con su mánager?
Canta él y yo escucho.
Ha dicho varias veces que su ídolo era Armstrong, ¿hubiera sido ciclista de haber podido?
Sí, de no haber sido piloto, la bici es mi gran pasión.
Pero para ganar un Tour no estamos, ¿no?
No creo que a un buen nivel, pero un gregario... eso si hubiera podido ser.
Cuentan que de niño le hizo una oferta el Celta de Vigo para ser portero. ¿Leyenda o verdad?
Fue a mi padre.
Pues menos mal que no aceptó...
Sí, menos mal. Nació mi hermana y por no moverse de Oviedo y lo demás, la rechazó.
Su padre hizo un kart a su hermana y se lo quedó usted. ¿Cuánto le debe a Lorena?
Todo, le debo todo porque si le llega a gustar el kart... Seguramente mi padre me hubiese hecho uno a mí, pero unos años más tarde y hubiésemos perdido ese tiempo.
Se calza siempre el botín izquierdo antes que el derecho, hace cábalas con los números de habitación de sus familiares o amigos ¿Piensa tanto antes de ponerse al volante?
Sí, sí y mucho más.
Seguro que está en las curvas pensando si se ha dejado el grifo abierto de la ducha..
Pienso en muchas cosas. En una ocasión, nada más terminar los entrenamientos del viernes, llamé a casa porque me había dejado la calefacción encendida; estaba ahí, en el coche, pensando si había apagado el botón o no y al final confirmé en mi mente que lo había dejado encendido y en cuanto me bajé del coche llamé a casa y les dije que lo apagaran, que me lo había dejado olvidado.
Con catorce años ganaba cien mil pesetas al mes corriendo en kárting, ¿qué hacía con tanto dinero?
Dárselo a mis padres, que lo habían puesto por mí. Y además tenía que viajar dos o tres veces al mes a Italia y, por tanto, ese dinero se iba rápidamente en billetes de avión.
Cuando se sacó el carné de conducir le advirtieron de que iba demasiado despacio. ¿Se lo han dicho alguna vez en un circuito?
Sí, algún ingeniero siempre es exigente y te dice "vamos a cambiar esto, pero en la próxima tanda tienes que tirar un poco más" y lo miras, con cara rara, por decirlo de alguna manera.
¿De verdad su olor preferido es el de la gasolina?
Me gusta el olor a gasolina. Quizá no sea el preferido, me gusta el café también, pero hay gente que va a una gasolinera y no le gusta, se siente mal, pero yo bien.
Una vez dijo que no sabía cuánto dinero tenía, pero ¿sabe cuánto cuesta un café?
No.
¿Seguro?
Uno veinte, uno cincuenta...
Años después de debutar con un F-1, aún está enamorado de este deporte, ¿Le baila un gusano en la tripa cuando vuela a 300 por hora?
Uff... No es la misma sensación, ahora es más tu trabajo, has perdido un poco de sensación porque es algo que haces casi todos los días. Pero se ha convertido en una necesidad, si estás unos meses sin subirte al coche, no sabes qué hacer.
Gana en las distancias cortas, pero no le gusta estar rodeado de gente, mucha gente... ¿O sí?
Depende de qué gente, hay momentos que sí y otros en los que no es necesario, pero lo que llega a las casas es diferente. Estás aquí, acabas de hacer casi 600 kilómetros y lo que se ves es que vas caminando entre empujones, aquí y allá, y no te puedes parar con todo el mundo, pero intento atender a todos lo mejor posible.
-¿Alonso va bien?
Bien, sí. Va bien, de momento, pero tengo que mejorar.
Fuente: As
Si gana un gran premio repite hotel, habitación, cena... ¿Se acuerda de todo?
Sí, sí que me acuerdo.
¿Es verdad que antes de la carrera canta un rito con su mánager?
Canta él y yo escucho.
Ha dicho varias veces que su ídolo era Armstrong, ¿hubiera sido ciclista de haber podido?
Sí, de no haber sido piloto, la bici es mi gran pasión.
Pero para ganar un Tour no estamos, ¿no?
No creo que a un buen nivel, pero un gregario... eso si hubiera podido ser.
Cuentan que de niño le hizo una oferta el Celta de Vigo para ser portero. ¿Leyenda o verdad?
Fue a mi padre.
Pues menos mal que no aceptó...
Sí, menos mal. Nació mi hermana y por no moverse de Oviedo y lo demás, la rechazó.
Su padre hizo un kart a su hermana y se lo quedó usted. ¿Cuánto le debe a Lorena?
Todo, le debo todo porque si le llega a gustar el kart... Seguramente mi padre me hubiese hecho uno a mí, pero unos años más tarde y hubiésemos perdido ese tiempo.
Se calza siempre el botín izquierdo antes que el derecho, hace cábalas con los números de habitación de sus familiares o amigos ¿Piensa tanto antes de ponerse al volante?
Sí, sí y mucho más.
Seguro que está en las curvas pensando si se ha dejado el grifo abierto de la ducha..
Pienso en muchas cosas. En una ocasión, nada más terminar los entrenamientos del viernes, llamé a casa porque me había dejado la calefacción encendida; estaba ahí, en el coche, pensando si había apagado el botón o no y al final confirmé en mi mente que lo había dejado encendido y en cuanto me bajé del coche llamé a casa y les dije que lo apagaran, que me lo había dejado olvidado.
Con catorce años ganaba cien mil pesetas al mes corriendo en kárting, ¿qué hacía con tanto dinero?
Dárselo a mis padres, que lo habían puesto por mí. Y además tenía que viajar dos o tres veces al mes a Italia y, por tanto, ese dinero se iba rápidamente en billetes de avión.
Cuando se sacó el carné de conducir le advirtieron de que iba demasiado despacio. ¿Se lo han dicho alguna vez en un circuito?
Sí, algún ingeniero siempre es exigente y te dice "vamos a cambiar esto, pero en la próxima tanda tienes que tirar un poco más" y lo miras, con cara rara, por decirlo de alguna manera.
¿De verdad su olor preferido es el de la gasolina?
Me gusta el olor a gasolina. Quizá no sea el preferido, me gusta el café también, pero hay gente que va a una gasolinera y no le gusta, se siente mal, pero yo bien.
Una vez dijo que no sabía cuánto dinero tenía, pero ¿sabe cuánto cuesta un café?
No.
¿Seguro?
Uno veinte, uno cincuenta...
Años después de debutar con un F-1, aún está enamorado de este deporte, ¿Le baila un gusano en la tripa cuando vuela a 300 por hora?
Uff... No es la misma sensación, ahora es más tu trabajo, has perdido un poco de sensación porque es algo que haces casi todos los días. Pero se ha convertido en una necesidad, si estás unos meses sin subirte al coche, no sabes qué hacer.
Gana en las distancias cortas, pero no le gusta estar rodeado de gente, mucha gente... ¿O sí?
Depende de qué gente, hay momentos que sí y otros en los que no es necesario, pero lo que llega a las casas es diferente. Estás aquí, acabas de hacer casi 600 kilómetros y lo que se ves es que vas caminando entre empujones, aquí y allá, y no te puedes parar con todo el mundo, pero intento atender a todos lo mejor posible.
-¿Alonso va bien?
Bien, sí. Va bien, de momento, pero tengo que mejorar.
Fuente: As
"Cuando tenga 50 años miraré los trofeos que he conseguido, pero hoy no me sirven de nada. Quiero volver a ganar".- Fernando Alonso