26-05-2013, 18:59
(Este mensaje fue modificado por última vez en: 26-05-2013, 19:04 por DE-ZETA-TE.)
(26-05-2013, 18:51)Alano_Spanol escribió: Y REPITO...
Los mismos días (15, 16 y 17 de mayo), de la misma semana Red Bull ESTABA en IDIADA..
(17-05-2013, 11:32)alarcos (17/05/2013) escribió: Hoy en Idiada..
http://twitter.com/alarcosF1/status/3353...92/photo/1
http://twitter.com/alarcosF1/status/3353...96/photo/1
http://twitter.com/alarcosF1/status/3353...20/photo/1
http://twitter.com/alarcosF1/status/3353...21/photo/1
...y hace unas semanas denegaron más test privados..... Os dejo aquí esto que escribí y tenía preparado para la Crónica de España que no escribí finalmente...
LA RESTRICCIÓN DE LOS TEST PRIVADOS:
Desde su prohibición en 2009 (por el Acuerdo de Restricción de Recursos y con la justificación del control presupuestario en medio de la crisis económica) los test privados han constituído una recurrente reevindicación de Ferrari. Máxime cuando la evolución de la reglamentación (añadida a la congelación de los motores) han otorgado cada vez más importancia a la aerodinámica sobre la mecánica. Y conforme se ponía de manifiesto el retraso tecnológico y metodológico de la Scuderia, en áreas tan críticas como el túnel de viento, el diseño CFD, la simulación, los sistemas de trabajo y de producción.
Embarcados desde la llegada de Pat Fry a la dirección técnica en una verdadera revolución, destinada a salvar la brecha sobre todo con Red Bull y McLaren, los de Maranello aún así no han renunciado a conseguir el regreso de las sesiones privadas. Con el evidente objetivo de mejorar el desarrollo de sus monoplazas, que no volvieron a destacar claramente desde la eliminación de los test. Con la excusa de kilómetros de rodaje para las jóvenes promesas, futuros pilotos de F1 con contadísimas oportunidades para rodar con un monoplaza de la temporada en curso. Pero sobre todo con la vista puesta en el radical cambio del Mundial 2014, que afectará principalmente a la motorización, al sustituírse los V8 2.4 Atmosféricos por los nuevos V6 Turbo 1.6.
Esta semana saltaba la noticia, en boca del director general de McLaren Jonathan Neale, de que los equipos votarían el 8 de Mayo la ampliación del número de test permitidos. El motivo la insistencia de Ferrari y su supuesta alianza con varios equipos para lograrlo. Neal dejó claro que entendía el interés de la Scuderia, por ser la única que dispone de pista propia en Fiorano. No ocultó la oposición de McLaren, según él porque los motivos financieros de la prohibición siguen ahí. Y según mi opinión: por el pánico que desata en la mayoría del paddock la posibilidad de una Ferrari en franca progresión, con más test privados disponibles, y con Alonso como primer espada y principal piloto de pruebas…
Y como era de esperar: en la votación del Grupo de Trabajo Deportivo de la F1 ganó la negativa a más test, una vez iniciada la temporada regular. Tan sólo Ferrari, su cliente de motores Sauber y una Marussia de la que se rumorea montará el propulsor italiano en 2014, votaron a favor. La mayoría de los 8 restantes, y escudándose en el aumento de costes que ello significaría, han optado finalmente por mantener la prohibición. Sólo seguirán permitidos los test aerodinámicos en recta, y los de jóvenes pilotos al final de temporada.
Poco más se puede aportar en este debate, salvo quizás dos aspectos: más test significan más dinero y recursos, obvio. Pero sabiendo por donde se pasan todos el control de costes (incluyendo Ferrari), con todo tipo de artimañas y vericuetos legales, el argumento en contra por ahorro suena a chiste malo. Dejémosnos de cuentos y al menos hablemos claro: simplemente no quieren permitir la más mínima ventaja a una Scuderia que empieza a meter miedo, y que se pone tecnológicamente las pilas a marchas forzadas. Mientras tanto, y en otro de los surrealistas y manipulados aspectos de este Gran Circo, tan difícil de explicar a los no conocedores de sus entresijos: este nuestro “deporte” es el único en el que al deportista no se le deja entrenar antes de competir. Y con la expresión “deportista” no me refiero sólo al piloto, si no a la otra mitad del tándem: el monoplaza de F1.