29-08-2013, 21:12
Diez lugares… 03 – Italia
Publicado en 15/08/2013 de Carlos Castellá
Si, Italia. Hay muchas cosas que ver en la Italia automovilística, así que este es un destino genérico, de los que aparecerán algunos más en esta serie. Italia tiene muchas cosas que ver y visitar, pero es evidente que las máximas son Monza y Maranello.
Ir a Monza para el Gran Premio (tranquilos que Ecclestone no se lo cargará) es uno de las cosas más accesibles e interesantes que se pueden hacer, porque el país es similar al nuestro, no está lejos y es un viaje al que se le puede sacar mucho provecho.
El circuito es viejo y no muy cómodo a nivel de accesos, parkings y lugares donde ver la carrera, pero claro es Monza, uno de los escasos “templos” que aún quedan en pie y donde poder ver un gran premio de los llamados históricos. Es difícil moverse por el circuito y muy poco probable que podáis entrar, aunque sea brevemente, en el viejo ovalo.
Pero el ambiente de Monza es increíble e inenarrable, es un público fervoroso, totalmente ferrarista, pero también entendido a la vez que un tanto exótico. Yo he visto por las pelousses a mamás con niños en el cochecito (sin el padre, la aficionada era la mamá, envuelta en una bandera), abuelas tejiendo calceta con un ojo y con el otro pendiente de la pista ¡e incluso trileros intentando engañar a algún incauto!
museo-660x401Hay mucho público, así que es cuestión de asegurarse la entrada y el alojamiento con tiempo suficiente y por supuesto aprovechar el viaje para intentar llegar hasta Maranello y visitar el Museo Ferrari y hacerse las fotos de rigor en el restaurante “Il Cavallino” y por supuesto en la puerta de entrada de la factoría.
Si vamos a Maranello se puede aprovechar para hacer una visita a Imola, que está a menos de cien kilómetros. Una foto en la estatua en recuerdo de Senna puede ser un motivo más que suficiente para ir hasta allí, si bien a mi el circuito no me gusta nada y no se si es posible acceder en días laborables, es decir, sin que haya carrera.
Monza, Maranello e Imola son los tres ejes fundamentales de un viaje a Italia, donde como ya he dicho otras veces y repetiré en esta serie, también vale la pena hacer con ocasión de alguna reunión que no sea el Gran Premio. En Monza con el WTCC o las WS el ambiente es mucho más tranquilo y se puede disfrutar mejor del circuito. Además al ser reuniones menos importantes se puede aprovechar el viernes para ir a los otros lugares mencionados.
Pero Italia tiene mucho más que ver: En Módena está el museo dedicado a Enzo Ferrari y el museo Alfa Romeo está en Arese, prácticamente al lado de Milán; El circuito de Mugello permite visitar la Toscana, una de las zonas más bonitas de Italia, a un tiro de piedra de Florencia, una de las ciudades más artísticas del mundo; si sois más “moteros” evidentemente además de Mugello hay que ir a Misano y visitar la zona del Adriático con sus magníficas playas y además hacer una excursión para subir a San Marino. Como país es poca cosa pero siempre es una experiencia poder decir que se ha estado allí. Y por supuesto si el viaje no es sólo automovilístico, la visita a Venecia es imprescindible.
No me olvido de las muchas pistas de karting que existen, algunas de cuyas pruebas son de relevancia internacional y que también pueden ser la excusa para hacer un viaje a Italia si estáis metidos en ese mundillo. No creáis que ir a carreras de karts es una nadería, yo fui a tres mundiales y en ellos conocí y hablé con pilotos que luego han hecho historia.
1Una de las grandes ventajas de ir a Italia es que es un país parecido al nuestro y por tanto accesible tanto económica como culturalmente. La comida es buena y barata, sus gentes son amables y el idioma no es una barrera infranqueable, lo que facilita mucho las cosas. En el lado negativo, sus carreteras y autopistas están mal señalizadas, ya que muchas veces las indicaciones están justo encima de la salida y cuando uno la ve ya es demasiado tarde. También mucho cuidado con su manera de conducir, van a ritmo de gran premio, respetan las señales sólo cuando es imprescindible y utilizan la bocina constantemente. Y si vais a alguna carrera, mucho cuidado en no dejar nada de valor dentro del coche si no queréis llevaros un disgusto.
Y para terminar, un último apunte sobre la Italia automovilística: el circuito de Vallelunga está cerca de Roma (ciudad imprescindible) y si os proponéis unas vacaciones en Sicilia, allí está el circuito de Enna-Pergusa (el pueblo es Enna y el circuito bordea el lago de Pergusa) y visitar la isla siguiendo el recorrido de la Targa Florio es una de las asignaturas que espero aprobar algún día.
http://carloscastella.wordpress.com/2013...03-italia/
Publicado en 15/08/2013 de Carlos Castellá
Si, Italia. Hay muchas cosas que ver en la Italia automovilística, así que este es un destino genérico, de los que aparecerán algunos más en esta serie. Italia tiene muchas cosas que ver y visitar, pero es evidente que las máximas son Monza y Maranello.
Ir a Monza para el Gran Premio (tranquilos que Ecclestone no se lo cargará) es uno de las cosas más accesibles e interesantes que se pueden hacer, porque el país es similar al nuestro, no está lejos y es un viaje al que se le puede sacar mucho provecho.
El circuito es viejo y no muy cómodo a nivel de accesos, parkings y lugares donde ver la carrera, pero claro es Monza, uno de los escasos “templos” que aún quedan en pie y donde poder ver un gran premio de los llamados históricos. Es difícil moverse por el circuito y muy poco probable que podáis entrar, aunque sea brevemente, en el viejo ovalo.
Pero el ambiente de Monza es increíble e inenarrable, es un público fervoroso, totalmente ferrarista, pero también entendido a la vez que un tanto exótico. Yo he visto por las pelousses a mamás con niños en el cochecito (sin el padre, la aficionada era la mamá, envuelta en una bandera), abuelas tejiendo calceta con un ojo y con el otro pendiente de la pista ¡e incluso trileros intentando engañar a algún incauto!
museo-660x401Hay mucho público, así que es cuestión de asegurarse la entrada y el alojamiento con tiempo suficiente y por supuesto aprovechar el viaje para intentar llegar hasta Maranello y visitar el Museo Ferrari y hacerse las fotos de rigor en el restaurante “Il Cavallino” y por supuesto en la puerta de entrada de la factoría.
Si vamos a Maranello se puede aprovechar para hacer una visita a Imola, que está a menos de cien kilómetros. Una foto en la estatua en recuerdo de Senna puede ser un motivo más que suficiente para ir hasta allí, si bien a mi el circuito no me gusta nada y no se si es posible acceder en días laborables, es decir, sin que haya carrera.
Monza, Maranello e Imola son los tres ejes fundamentales de un viaje a Italia, donde como ya he dicho otras veces y repetiré en esta serie, también vale la pena hacer con ocasión de alguna reunión que no sea el Gran Premio. En Monza con el WTCC o las WS el ambiente es mucho más tranquilo y se puede disfrutar mejor del circuito. Además al ser reuniones menos importantes se puede aprovechar el viernes para ir a los otros lugares mencionados.
Pero Italia tiene mucho más que ver: En Módena está el museo dedicado a Enzo Ferrari y el museo Alfa Romeo está en Arese, prácticamente al lado de Milán; El circuito de Mugello permite visitar la Toscana, una de las zonas más bonitas de Italia, a un tiro de piedra de Florencia, una de las ciudades más artísticas del mundo; si sois más “moteros” evidentemente además de Mugello hay que ir a Misano y visitar la zona del Adriático con sus magníficas playas y además hacer una excursión para subir a San Marino. Como país es poca cosa pero siempre es una experiencia poder decir que se ha estado allí. Y por supuesto si el viaje no es sólo automovilístico, la visita a Venecia es imprescindible.
No me olvido de las muchas pistas de karting que existen, algunas de cuyas pruebas son de relevancia internacional y que también pueden ser la excusa para hacer un viaje a Italia si estáis metidos en ese mundillo. No creáis que ir a carreras de karts es una nadería, yo fui a tres mundiales y en ellos conocí y hablé con pilotos que luego han hecho historia.
1Una de las grandes ventajas de ir a Italia es que es un país parecido al nuestro y por tanto accesible tanto económica como culturalmente. La comida es buena y barata, sus gentes son amables y el idioma no es una barrera infranqueable, lo que facilita mucho las cosas. En el lado negativo, sus carreteras y autopistas están mal señalizadas, ya que muchas veces las indicaciones están justo encima de la salida y cuando uno la ve ya es demasiado tarde. También mucho cuidado con su manera de conducir, van a ritmo de gran premio, respetan las señales sólo cuando es imprescindible y utilizan la bocina constantemente. Y si vais a alguna carrera, mucho cuidado en no dejar nada de valor dentro del coche si no queréis llevaros un disgusto.
Y para terminar, un último apunte sobre la Italia automovilística: el circuito de Vallelunga está cerca de Roma (ciudad imprescindible) y si os proponéis unas vacaciones en Sicilia, allí está el circuito de Enna-Pergusa (el pueblo es Enna y el circuito bordea el lago de Pergusa) y visitar la isla siguiendo el recorrido de la Targa Florio es una de las asignaturas que espero aprobar algún día.
http://carloscastella.wordpress.com/2013...03-italia/
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