18-04-2011, 00:09
Ferrari necesita una revolución. Y como en toda revolución que se precie, tienen que rodar cabezas y correr la sangre. El lenguaje corporal de Fernando me dice que la cosa no tiene una solución a corto-medio plazo, lo cual en F1 significa olvidarse de luchar por el mundial.
Y no es sólo que falle el F 150º. Hay un fallo generalizado en el equipo Ferrari. Fallan los dirigentes, empezando por Dominicali, Fry y Costa, fallan los mecánicos, fallan las estrategias, falla la fiabilidad del puñetero alerón que se abre y se cierra cuande le viene en gana... Únicamente salvaría a los pilotos, que con algunos fallos, salen a la pista desmoralizados y vendidos tratando de poner buena cara por aquello de hacer equipo y no empeorar el ambiente.
No se pueden dedicar los viernes a hacer el trabajo aerodinámico de pretemporada y luego querer salir el domingo con los reglajes bien hechos. No tengo nada claro que los de Ferrari sepan cómo salir de este embrollo, y cada carrera que pasa sin reaccionar, el liston de prestaciones se coloca más alto.
En otra época, Ferrari habría tirado a la chatarra este coche y estaría fabricando otro a marchas forzadas. Pero era la época de presupuestos ilimitados, motores sin capar, neumáticos a la carta, pruebas en Fiorano a destajo y dirigentes al frente que sabían por dónde tirar, aunque fuese bailando en el filo del reglamento. Pero en la F1 actual, el que la caga en pretemporada lo paga duramente desde la primera carrera, sobre todo si no saben dónde se equivocaron ni si su simulador y su tunel del viento son de fiar.
Tal y como están las cosas, no veo ninguna garantía de que el coche de 2012 vaya a ir por buen camino. Con el mismo equipo y los mismos medios que ahora mismo, no.
Y no es sólo que falle el F 150º. Hay un fallo generalizado en el equipo Ferrari. Fallan los dirigentes, empezando por Dominicali, Fry y Costa, fallan los mecánicos, fallan las estrategias, falla la fiabilidad del puñetero alerón que se abre y se cierra cuande le viene en gana... Únicamente salvaría a los pilotos, que con algunos fallos, salen a la pista desmoralizados y vendidos tratando de poner buena cara por aquello de hacer equipo y no empeorar el ambiente.
No se pueden dedicar los viernes a hacer el trabajo aerodinámico de pretemporada y luego querer salir el domingo con los reglajes bien hechos. No tengo nada claro que los de Ferrari sepan cómo salir de este embrollo, y cada carrera que pasa sin reaccionar, el liston de prestaciones se coloca más alto.
En otra época, Ferrari habría tirado a la chatarra este coche y estaría fabricando otro a marchas forzadas. Pero era la época de presupuestos ilimitados, motores sin capar, neumáticos a la carta, pruebas en Fiorano a destajo y dirigentes al frente que sabían por dónde tirar, aunque fuese bailando en el filo del reglamento. Pero en la F1 actual, el que la caga en pretemporada lo paga duramente desde la primera carrera, sobre todo si no saben dónde se equivocaron ni si su simulador y su tunel del viento son de fiar.
Tal y como están las cosas, no veo ninguna garantía de que el coche de 2012 vaya a ir por buen camino. Con el mismo equipo y los mismos medios que ahora mismo, no.