30-04-2011, 12:01
(30-04-2011, 11:18)raf_alín escribió: No sé cual de los dos tenéis razón pero Arco, sí hay diferencias entre un alerón y otro.
Ayer no las veía pero con esta foto que habéis puesto hoy si se pueden apreciar. Son mínimas y muy sutiles pero las hay. Que sean suficientes para compensar la "descompensación" del paso de una escala a otra no lo sé.
Fijaros bién en los flaps superior y central, ambos son distintos en su acabado. En el alerón antíguo el flap central sobre todo, se nota que acaba con un corte oblícuo y en el nuevo el corte es vertical. El flap superior también acaba en un corte mas vertical.
El endplate lateral principal (el mas grande) se nota un poco mas grueso en el viejo y el endplate exterior también cambia de contorno.
Como digo son cambios muy sutiles, pero los hay.
Yo solo veo dos detalles diferentes: el panel de arriba (de los tres en que se divide el alerón) es ahora un par de centimetros más corto, y la pieza que antes unía las dos superficies de arriba ahora sujeta la de más abajo, sin duda para evitar que flexe tanto.
En definitiva, dos soluciones revolucionarias que nos darán, sin duda, entre 7 y 48 segundos de golpe.
Tras esta remodelación concienzuda, el trabajo de estas semanas comienza por fin a dar frutos.
PD: Respecto a lo de probar.
Actualmente no es necesario probar nada. McLaren NO ha probado nada este año y mirad como va.
El problema es que en Ferrari se han acostumbrado a trabajar a base de probar miles de piezas en test privados hasta que sonase la flauta, y ahora no pueden. Deben cambiar el método. No pueden seguir con el sistema de dar palos de ciego durante kilómetros hasta que dan con la solución. Deben diseñar una solución sobre el papel, y que funcione en la práctica a la primera. Una labor que requiere de excelentes ingenieros con talento y creatividad.
Ferrari me parece cada día más a la típica empresa española casposa, de las cuales puedo hablar porque he trabajado o he estado en contacto con varias: el más burro es el jefe (como no), y el más mala sombra el encargado de la paga-nómina de los trabajadores (evidentemente para motivar) que actua como si el dinero fuese de su bolsillo. De esa manera espantan a gente válida con ambición y voluntad de exito. La prerrogativas van en razón inversa al talento, valía o esfuerzo del personal. Si algo está bien ideado se cambia para que funcione mal. Si algo va mal, la culpa es del último en llegar. Los organigramas parecen cuadros genealógicos. No vale la pena esforzarse porque no sirve de nada, no cunde, porque lo que hace alguno bien, lo deshace otro y no pasa nada, etc.
Esto es España, pero Italia no nos anda a la zaga.
¡Avanti, Fer, AVANTI!