26-07-2015, 02:39
(Este mensaje fue modificado por última vez en: 26-07-2015, 17:11 por DE-ZETA-TE.)
... SOMOS ALONSISTAS... ÉL NO SE RINDE; NOSOTROS TAMPOCO...
Rocroi, mayo de 1643. El tercio viejo de Cartagena después de ocho horas de batalla...
El cuadro de Alatriste, Íñigo y Copons aguanta el cañoneo francés. Sigue una carga francesa a caballo rechazada con fuego de arcabuz y mosquete, y luego con picas. Después ambas infanterías se traban en un combate de picas con algunos soldados saliendo por debajo a luchar cuchillo en mano. Copons resulta herido y Alatriste queda atrapado bajo un francés al que acaba de matar. Corte. El tercio rehace sus filas.
Copons: ¿Ya no escribes?
Íñigo: No, ya no.
Copons: ¿Eso no se olvida, no?
Íñigo: No se olvida, no. (Alatriste ayuda a Bragado a sentarse. El general Melo aparece detrás de ellos en silla de manos)
Melo: Soldado.
Alatriste: ¿Señor?
Melo: ¿Vos sois?
Alatriste: Alatriste, Excelencia.
Melo: Ya recuerdo. ¿No os di una ventaja de ocho escudos por salvar a un sargento mayor en Nördlingen?
Alatriste: Me los rebajaron a cuatro, Excelencia.
Melo: Vaya, mala suerte, soldado.
Alatriste: Sí, mala suerte, Excelencia. (saluda y se va. Los franceses se acercan a parlamentar)
Melo: Bragado.
Bragado, herido en la garganta, se acerca a parlamentar con los franceses junto a Alatriste, Íñigo, Copons y otros dos.
Bragado: Diego, si yo no puedo sigue tú.
Enviado francés (se quita el casco): Señores, el duque de Enghien considera que habéis combatido con valor que excede las palabras. Por eso os ofrece una rendición honrosa. Podéis conservar vuestras banderas y salir en formación. ¿Qué decís?
(Bragado no puede hablar y Copons da unos pasos y se tambalea. Alatriste le mantiene en pie)
Alatriste: Decidle al señor duque de Enghien que agradecemos sus palabras, pero esto es un tercio español.
(Bragado hace un gesto como diciendo eso es todo y se van)
Copons: Diego, hasta aquí hemos llegado. (Alatriste le tapona la herida y se va) ...Íñigo, cuenta lo que fuimos. (se va y Copons cae muerto en medio del campo. Los demás vuelven a filas. Los franceses se preparan para cargar)
Sargento mayor: ¡Soldados antiguos, a vanguardia! ¡Soldados nuevos, a retaguardia!
(Alatriste envía a Íñigo atrás con una mirada. Los franceses cargan. Los dos hombres al lado de Alatriste caen muertos. Alatriste es alcanzado, pero se rehace)
Íñigo (en off): No era el hombre más honesto ni el más piadoso, pero era un hombre valiente. Se llamaba Diego Alatriste y había luchado como soldado de los tercios viejos en las guerras de Flandes. Cuando lo conocí malvivía en Madrid alquilándose por cuatro maravedís en trabajos de poco lustre, a menudo en calidad de espadachín por cuenta de otros que no tenían la destreza o los arrestos... (Alatriste carga espada en mano, gritando)