12-07-2016, 13:45
(Este mensaje fue modificado por última vez en: 12-07-2016, 13:46 por German Sanchez.)
Todo empieza a encajar, muy lentamente pero empieza a encajar. La primera fase está siendo el re acomodo de Sebastiano en el panorama actual, mostrando su categoría real muy alejada de la imagen de astro que nos intentaron meter con calzador tras su paso hacendado por Red Full. Esa fase sigue en progresión y está todavía lejos de su ebullición. Todas las palabras premonitorias de Fernando Alonso ("sus cuatro títulos le pueden convertir en leyenda o ser una losa...") se van cumpliendo (de las del gran Carreño no hace falta decir nada más). Me entristece por los Ferraristas de corazón, pero la unión del Atila de los negocios, la estanquera y el mayor bluff de piloto de los últimos tiempos no podían producir nada bueno, a pesar de las millonadas y poderío de la maquinaria manipuladora. Ya queda meridianamente claro que la decisión de dejar Ferrari porque era imposible ganar en los dos años que le quedaban de contrato a FER, era correcta.
La segunda fase es la de ganar en el equipo por el que decidió apostar. Eso es más complicado pero con un 2017 que le parezca a Fernando atractivo, yo no tengo dudas de que le queda cuerda para rato, al menos 5 años más y es ese escenario el tercero es muy posible. McLaren y Honda ya están trabajando juntos mucho mejor.
Poco a poco, la venganza se cocina lentamente y la satisfacción que tendremos a partir de que las cosas empiecen a salir medianamente bien, va a ser brutal.
Si este año conseguimos batir a algún Ferrari en pista va a ser para abrir una botellita de cava, sin duda alguna.
La segunda fase es la de ganar en el equipo por el que decidió apostar. Eso es más complicado pero con un 2017 que le parezca a Fernando atractivo, yo no tengo dudas de que le queda cuerda para rato, al menos 5 años más y es ese escenario el tercero es muy posible. McLaren y Honda ya están trabajando juntos mucho mejor.
Poco a poco, la venganza se cocina lentamente y la satisfacción que tendremos a partir de que las cosas empiecen a salir medianamente bien, va a ser brutal.
Si este año conseguimos batir a algún Ferrari en pista va a ser para abrir una botellita de cava, sin duda alguna.
Siempre con Fernando, año tras año.
Un imbécil que lee mucho no reduce un ápice su imbecilidad. Si acaso, se convierte en un imbécil leído.