09-03-2017, 18:42
(Este mensaje fue modificado por última vez en: 09-03-2017, 18:45 por Phasor.)
Yo veo que la tendencia es más un 2015 que un 2016 (igual un término medio entre ambos). La diferencia es que ahora no hay tokens, por lo que deberían poder resolverlo en algún momento. Lo que tengo claro es que la solución no será de aquí a Australia. Veremos en qué momento del campeonato se endereza el asunto.
Lo único positivo que personalmente veo, es que Alonso no parece querer marcharse ya de la F1. Está cabreado, no quiere marcharse en un momento tan negativo y sigue con unas ganas tremendas del tercero. Tiene pinta de que mientras se vea competitivo en relación a sus compañeros, sigue...
Pero por otro lado, temo que esas declaraciones de ayer tuvieran más que ver con un momento de calentón, por pura frustración. Si avanza el año y se arrastran tipo 2015, deberían entrarle decenas de dudas sobre su continuidad de aquí a septiembre, salvo que le surja cambiar a otra escudería competitiva (lo veo muy poco probable). Nadie quiere arrastrarse en pista. Porque una cosa es que el coche no sea rápido, y otra no poder apenas competir.
Estoy a la espera, pero yo de este año no espero nada especial. Mis esperanzas: que el coche no sea el desastre de 2015; que pueda terminar carreras normalmente; que lo que Alonso vea le sirva para quedarse.
P.D.: Me parece increible la positividad que tenéis... Ya habéis visto 2015 y 2016, y algunos pensáis que Honda puede rectificar esto a "corto plazo". Ole por vosotros ;-)
Lo único positivo que personalmente veo, es que Alonso no parece querer marcharse ya de la F1. Está cabreado, no quiere marcharse en un momento tan negativo y sigue con unas ganas tremendas del tercero. Tiene pinta de que mientras se vea competitivo en relación a sus compañeros, sigue...
Pero por otro lado, temo que esas declaraciones de ayer tuvieran más que ver con un momento de calentón, por pura frustración. Si avanza el año y se arrastran tipo 2015, deberían entrarle decenas de dudas sobre su continuidad de aquí a septiembre, salvo que le surja cambiar a otra escudería competitiva (lo veo muy poco probable). Nadie quiere arrastrarse en pista. Porque una cosa es que el coche no sea rápido, y otra no poder apenas competir.
Estoy a la espera, pero yo de este año no espero nada especial. Mis esperanzas: que el coche no sea el desastre de 2015; que pueda terminar carreras normalmente; que lo que Alonso vea le sirva para quedarse.
P.D.: Me parece increible la positividad que tenéis... Ya habéis visto 2015 y 2016, y algunos pensáis que Honda puede rectificar esto a "corto plazo". Ole por vosotros ;-)