14-07-2011, 11:01
Webber hará esperar a Alguersuari un año más
"Mark Webber renovará con nosotros", ha declarado a la revista Autosport Dietrich Mateschitz, el propietario del imperio Red Bull. "Va a ocurrir seguro. Es muy popular dentro del equipo, él se siente cómodo, y es una relación excelente. Él lo sabe, y nosotros también". Quizás sean las declaraciones más relevantes en lo que llevamos de temporada por las implicaciones que pueden suponer en varios frentes. Entre ellos, el de Jaime Alguersuari.
Mateschitz bajó de las alturas en el momento preciso, cuando la plácida temporada que está disfrutando su equipo podría complicarse en el terreno extradeportivo. Ni Horner, ni Marko, ha sido el magnate austríaco quien ha intervenido de forma tajante para zanjar posibles especulaciones que desestabilicen a Red Bull fuera de la pista. Ha estado rápido de reflejos.
En pleno proceso de renovación para Webber, el incidente de Silverstone con las órdenes de equipo estaba abriendo un frente polémico con repercusiones para próximas carreras en el seno de Red Bull. En primer lugar, ponía en evidencia el hipócrita discurso de 2010, al que tarde o temprano tendría que enfrentarse un equipo que aspira al título, como es ahora el caso del austríaco. Además, dejaba a Webber a los pies de los caballos, como le ocurriera a Massa el pasado año. De ahí que el australiano se revolviera después de la carrera. Que esta temporada todavía Webber pueda enfrentarse a más ocasiones como las de Silverstone tampoco es una realidad. Nada mejor que zanjar entonces la cuestión reforzando a Webber con el anuncio de renovación, un oportuno voto de confianza y un refuerzo de imagen en el momento más oportuno, contradiciendo a un Christian Horner que emplazaba la renovación para más adelante.
Si finalmente renovara el australiano -es de suponer que la palabra de Mateschitz será ley, salvo que Webber tenga otra opción y decidiera marcharse- el mensaje implica que ninguno de los dos pilotos de Toro Rosso ocupará su puesto en 2012. Helmut Marko reconocía recientemente que Alguersuari y Buemi solo ocuparían su puesto "cuando lo puedan hacer mejor" que el australiano. Es evidente que la renovación significa un año más de recorrido para ambos en 2012 si Ricciardo no cumple las expectativas y sigue repitiendo actuaciones como la de Silverstone con HRT o algunas de sus últimas actuaciones en las World Series.
Pero si Ricciardo progresa y finalmente se ganara un puesto en Toro Rosso para el año que viene, será a costa de uno de los pilotos actuales. De ahí su entrada en HRT. Afortunadamente, la magnífica progresión de Alguersuari no es ya una casualidad, sino el fruto de un trabajo sostenido para comprender y adaptarse a las gomas de Pirelli en paralelo con la necesaria puesta a punto de su monoplaza. De no ser por el accidente de Monaco, serían ya cuatro carreras consecutivas puntuando desde la decimoctava posición de salida. Parece que el catalán ha cogido la ola buena, y es de desear que siga subido a ella hasta final de temporada para continuar luego en Toro Rosso a la espera de la jubilación de Webber. Es ahora Buemi el que tiene la pelota en su tejado.
Pero la renovación de Webber afecta a otros frentes. Si el australiano era una llegó posible opción para sustituir a Ferrari en Massa, obviamente su renovación dejaría fuera a uno de los mejores candidatos para sustituir al brasileño. Alonso le dobla en puntos en 2011, y es evidente que el equipo italiano necesita un piloto más consistente no solo para sumar en la Clasificación de Constructores, tan importante económicamente, sino también para "robar" puntos a sus rivales, algo que Massa lo está logrando desde que llegara Alonso. Que Ferrari necesita un piloto más "pegador" es una realidad. Que se pueda encontrar alternativa, es otra.
En la Scuderia insisten en que Massa tiene contrato para 2012, pero también era el caso Barrichello y Raikkonen, por ejemplo, y ambos se marcharon antes de tiempo. Si en Mercedes consigue atar a Rosberg, como están intentando desesperadamente, a Ferrari se le acaban las opciones. ¿Será la prueba recientemente anunciada que llevarán a cabo Jules Bianchi y Sergio Pérez un examen con un propósito concreto al respecto? Aunque tengan talento, les falta todavía la experiencia suficiente para la envergadura de Ferrari.
En definitiva, con sus palabras, Mateschitz ha vuelto a demostrar un particular cariño hacia Webber, al que siempre ha apoyado a pesar del liderazgo de Vettel y al apoyo prioritario que Helmut Marko ha mostrado hacia el piloto alemán. La personalidad y el estilo de Webber siempre han gustado al magnate austríaco. No es de extrañar. Tampoco será un superclase pero, globalmente, por carisma e imagen, es de lo mejor de la parrilla actual. Y hay que reconocerle que al final de la carrera de Silverstone le echó un par de narices... Posiblemente, Webber, mejor que nadie, sabía lo que se hacía.
"Mark Webber renovará con nosotros", ha declarado a la revista Autosport Dietrich Mateschitz, el propietario del imperio Red Bull. "Va a ocurrir seguro. Es muy popular dentro del equipo, él se siente cómodo, y es una relación excelente. Él lo sabe, y nosotros también". Quizás sean las declaraciones más relevantes en lo que llevamos de temporada por las implicaciones que pueden suponer en varios frentes. Entre ellos, el de Jaime Alguersuari.
Mateschitz bajó de las alturas en el momento preciso, cuando la plácida temporada que está disfrutando su equipo podría complicarse en el terreno extradeportivo. Ni Horner, ni Marko, ha sido el magnate austríaco quien ha intervenido de forma tajante para zanjar posibles especulaciones que desestabilicen a Red Bull fuera de la pista. Ha estado rápido de reflejos.
En pleno proceso de renovación para Webber, el incidente de Silverstone con las órdenes de equipo estaba abriendo un frente polémico con repercusiones para próximas carreras en el seno de Red Bull. En primer lugar, ponía en evidencia el hipócrita discurso de 2010, al que tarde o temprano tendría que enfrentarse un equipo que aspira al título, como es ahora el caso del austríaco. Además, dejaba a Webber a los pies de los caballos, como le ocurriera a Massa el pasado año. De ahí que el australiano se revolviera después de la carrera. Que esta temporada todavía Webber pueda enfrentarse a más ocasiones como las de Silverstone tampoco es una realidad. Nada mejor que zanjar entonces la cuestión reforzando a Webber con el anuncio de renovación, un oportuno voto de confianza y un refuerzo de imagen en el momento más oportuno, contradiciendo a un Christian Horner que emplazaba la renovación para más adelante.
Si finalmente renovara el australiano -es de suponer que la palabra de Mateschitz será ley, salvo que Webber tenga otra opción y decidiera marcharse- el mensaje implica que ninguno de los dos pilotos de Toro Rosso ocupará su puesto en 2012. Helmut Marko reconocía recientemente que Alguersuari y Buemi solo ocuparían su puesto "cuando lo puedan hacer mejor" que el australiano. Es evidente que la renovación significa un año más de recorrido para ambos en 2012 si Ricciardo no cumple las expectativas y sigue repitiendo actuaciones como la de Silverstone con HRT o algunas de sus últimas actuaciones en las World Series.
Pero si Ricciardo progresa y finalmente se ganara un puesto en Toro Rosso para el año que viene, será a costa de uno de los pilotos actuales. De ahí su entrada en HRT. Afortunadamente, la magnífica progresión de Alguersuari no es ya una casualidad, sino el fruto de un trabajo sostenido para comprender y adaptarse a las gomas de Pirelli en paralelo con la necesaria puesta a punto de su monoplaza. De no ser por el accidente de Monaco, serían ya cuatro carreras consecutivas puntuando desde la decimoctava posición de salida. Parece que el catalán ha cogido la ola buena, y es de desear que siga subido a ella hasta final de temporada para continuar luego en Toro Rosso a la espera de la jubilación de Webber. Es ahora Buemi el que tiene la pelota en su tejado.
Pero la renovación de Webber afecta a otros frentes. Si el australiano era una llegó posible opción para sustituir a Ferrari en Massa, obviamente su renovación dejaría fuera a uno de los mejores candidatos para sustituir al brasileño. Alonso le dobla en puntos en 2011, y es evidente que el equipo italiano necesita un piloto más consistente no solo para sumar en la Clasificación de Constructores, tan importante económicamente, sino también para "robar" puntos a sus rivales, algo que Massa lo está logrando desde que llegara Alonso. Que Ferrari necesita un piloto más "pegador" es una realidad. Que se pueda encontrar alternativa, es otra.
En la Scuderia insisten en que Massa tiene contrato para 2012, pero también era el caso Barrichello y Raikkonen, por ejemplo, y ambos se marcharon antes de tiempo. Si en Mercedes consigue atar a Rosberg, como están intentando desesperadamente, a Ferrari se le acaban las opciones. ¿Será la prueba recientemente anunciada que llevarán a cabo Jules Bianchi y Sergio Pérez un examen con un propósito concreto al respecto? Aunque tengan talento, les falta todavía la experiencia suficiente para la envergadura de Ferrari.
En definitiva, con sus palabras, Mateschitz ha vuelto a demostrar un particular cariño hacia Webber, al que siempre ha apoyado a pesar del liderazgo de Vettel y al apoyo prioritario que Helmut Marko ha mostrado hacia el piloto alemán. La personalidad y el estilo de Webber siempre han gustado al magnate austríaco. No es de extrañar. Tampoco será un superclase pero, globalmente, por carisma e imagen, es de lo mejor de la parrilla actual. Y hay que reconocerle que al final de la carrera de Silverstone le echó un par de narices... Posiblemente, Webber, mejor que nadie, sabía lo que se hacía.