01-07-2021, 10:05
El mensaje de Alonso que eriza la piel de Alpine
Permane, director deportivo de Alpine, cuenta la intrahistoria del "beautiful" de Alonso y celebra: "Está disfrutando, feliz".
A vueltas con el proceso de adaptación de Fernando Alonso, que fue breve, pero existió. El asturiano sufrió en Ímola, aunque acabó a menos de un segundo de su compañero, y tuvo algún problema en las clasificaciones posteriores. Pero desde Portimao luce un ritmo de carrera de reloj, en Bakú volvió a protagonizar maniobras imposibles y lleva tres grandes premios consecutivos dentro de la Q3, el sábado, y con puntos, el domingo. "Ya voy al límite del coche, noveno", advirtió el pasado domingo a AS.
Un día antes, tras la clasificación, el bicampeón español dejó un original mensaje de radio a sus ingenieros: "Precioso ('beautiful', en inglés), he disfrutado, no importa la posición". Fue tras pasar el corte en la Q2, la comunicación se coló en la retransmisión oficial y llegó a todos los hogares… y las fábricas. Y Alan Permane, director deportivo de Alpine, se alegró: "Le dije después a Fernando que no subestime lo que significa un mensaje de radio que se emite públicamente. Ese mensaje se emite y todos lo escuchan en Enstone y Viry, y eso hace que sus semanas de trabajo merezcan la pena porque su piloto está muy feliz y les motiva".
"Cuando hubo problemas, Alonso nunca culpó al equipo"
"Esa vuelta de Q2 fue bastante buena, una de esas vueltas en las que mejoras un poquito en cada curva. Ni siquiera preguntó la posición hasta que entró en el ‘pit-lane’ porque sabía que había pasado el corte. Está cada vez más cómodo en el coche y es un punto fuerte, está disfrutando y está feliz", explica el ingeniero británico.
Permane ensalza los últimos meses de Alonso: "El proceso, como cualquier otro proceso en la F1, no tiene atajos. [b]No hay otra manera para encontrar carga aerodinámica o potencia, es simplemente trabajo duro”. “Hubo problemas (en Ímola), pero en lugar de tener rabietas o protestar, nunca culpó al equipo o al coche, siempre dijo que era él quien debía mejorar. Lo dijo en la oficina y lo dijo a la Prensa también. Y no considero que el proceso haya terminado ya, sigue construyendo su equipo", asegura.
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Permane, director deportivo de Alpine, cuenta la intrahistoria del "beautiful" de Alonso y celebra: "Está disfrutando, feliz".
A vueltas con el proceso de adaptación de Fernando Alonso, que fue breve, pero existió. El asturiano sufrió en Ímola, aunque acabó a menos de un segundo de su compañero, y tuvo algún problema en las clasificaciones posteriores. Pero desde Portimao luce un ritmo de carrera de reloj, en Bakú volvió a protagonizar maniobras imposibles y lleva tres grandes premios consecutivos dentro de la Q3, el sábado, y con puntos, el domingo. "Ya voy al límite del coche, noveno", advirtió el pasado domingo a AS.
Un día antes, tras la clasificación, el bicampeón español dejó un original mensaje de radio a sus ingenieros: "Precioso ('beautiful', en inglés), he disfrutado, no importa la posición". Fue tras pasar el corte en la Q2, la comunicación se coló en la retransmisión oficial y llegó a todos los hogares… y las fábricas. Y Alan Permane, director deportivo de Alpine, se alegró: "Le dije después a Fernando que no subestime lo que significa un mensaje de radio que se emite públicamente. Ese mensaje se emite y todos lo escuchan en Enstone y Viry, y eso hace que sus semanas de trabajo merezcan la pena porque su piloto está muy feliz y les motiva".
"Cuando hubo problemas, Alonso nunca culpó al equipo"
"Esa vuelta de Q2 fue bastante buena, una de esas vueltas en las que mejoras un poquito en cada curva. Ni siquiera preguntó la posición hasta que entró en el ‘pit-lane’ porque sabía que había pasado el corte. Está cada vez más cómodo en el coche y es un punto fuerte, está disfrutando y está feliz", explica el ingeniero británico.
Permane ensalza los últimos meses de Alonso: "El proceso, como cualquier otro proceso en la F1, no tiene atajos. [b]No hay otra manera para encontrar carga aerodinámica o potencia, es simplemente trabajo duro”. “Hubo problemas (en Ímola), pero en lugar de tener rabietas o protestar, nunca culpó al equipo o al coche, siempre dijo que era él quien debía mejorar. Lo dijo en la oficina y lo dijo a la Prensa también. Y no considero que el proceso haya terminado ya, sigue construyendo su equipo", asegura.
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