Otra cosa que añadir, y esto sí lo deben copiar de Red Bull:
Cuando en Suzuka Vettel rompe el ala y no hay una de repuesto (se la enviaron desde MK y llegò 20 minutos antes de la carrera), está claro que no es porque en Red Bull son unos mangutas desorganizados. Esa gente toma riesgos controlados, al límite pero controlados, me explico citando un artículo de Oriol Puigdemont que a su vez cita a un Ingeniero de Mclaren que trabajó en RB:
"No tenían dos alerones por el frenético ritmo de desarrollo que siguen en la fábrica. Cuando están fabricando el de un gran premio ya están diseñando y desarrollando el que colocarán en el coche en la siguiente prueba. No paran", reconoce esta voz autorizada.
En ese caso, no obstante, tampoco se entiende que pudieran fabricar uno nuevo en solo unas horas y que llegara a tiempo a Suzuka para colocarlo en el coche de Vettel el sábado. "Lo que se hace en estos casos es modificar uno utilizado en una carrera anterior", añade este técnico. Y para ello, Red Bull tuvo que encender el horno. "A diferencia de los demás equipos, las aletas no se atornillan al alerón sino que van pegadas. Así, evitan esa posible desviación que, a pesar de ser mínima, siempre hay en los tornillos en función de quién los aprieta y cómo", concluye el ingeniero.
O sea, innvoación + riesgo máximo controlado + protocolo de emergencia por si se rompe la única unidad de la pieza.
Mientras, Aldo Costa tendría listos 5 alerones clavaditos uno a otro, por si las moscas...
Cuando en Suzuka Vettel rompe el ala y no hay una de repuesto (se la enviaron desde MK y llegò 20 minutos antes de la carrera), está claro que no es porque en Red Bull son unos mangutas desorganizados. Esa gente toma riesgos controlados, al límite pero controlados, me explico citando un artículo de Oriol Puigdemont que a su vez cita a un Ingeniero de Mclaren que trabajó en RB:
"No tenían dos alerones por el frenético ritmo de desarrollo que siguen en la fábrica. Cuando están fabricando el de un gran premio ya están diseñando y desarrollando el que colocarán en el coche en la siguiente prueba. No paran", reconoce esta voz autorizada.
En ese caso, no obstante, tampoco se entiende que pudieran fabricar uno nuevo en solo unas horas y que llegara a tiempo a Suzuka para colocarlo en el coche de Vettel el sábado. "Lo que se hace en estos casos es modificar uno utilizado en una carrera anterior", añade este técnico. Y para ello, Red Bull tuvo que encender el horno. "A diferencia de los demás equipos, las aletas no se atornillan al alerón sino que van pegadas. Así, evitan esa posible desviación que, a pesar de ser mínima, siempre hay en los tornillos en función de quién los aprieta y cómo", concluye el ingeniero.
O sea, innvoación + riesgo máximo controlado + protocolo de emergencia por si se rompe la única unidad de la pieza.
Mientras, Aldo Costa tendría listos 5 alerones clavaditos uno a otro, por si las moscas...
These are winning laps, mate (Rod Nelson a Fernando Alonso en Bahrein 2006)