Lotus: "un poco decepcionados" por la decisión de Pirelli

[LastSamurai]

Domenicali es un pusilánime inocuo, perrofaldero y acomplejado. Bambi en una jaula de leones. Buenrrollismo pasteloso en un entorno de mega-maxi-ultra-competitividad, estrategia y astucia. Un pobre hombre superado por la desgracia de haber sido nombrado para un puesto que supera con creces sus capacidades.

Montezemolo amanece más preocupado por lucir flequillo y Armani, repartir canapés entre generosos patrocinadores, y pasear su ego por las surtidas presentaciones de nuevos modelos de calle, parques de atracciones, tiendas comerciales y demás folclore, que por pegar un puñetazo encima de la mesa cuando procede, por defender los intereses de la escuderia mas importante del circo.

¿Qué se puede esperar cuando los dos maximos responsables de una organización responden a estos perfiles?
Pues eso, que tenga que venir un piloto, por suerte para ellos el mejor de la historia probablemente, a dar 4 gritos en la fábrica cuando toca, y a base de empujones, carisma y agallas consiga salvarte el culo de hacer el ridiculo mas espantoso durante 3 temporadas.
Porque nadie dude que Fernando, de puertas adentro ha montado mas de 4 y 5 cirios apocalipticos, en situaciones en las que el equipo parecia una turba de becarios, empezando por el aerodinamicista y acabando porque el que aprieta las tuercas.

Verdaderamente lamentable.
Subproducto de la estupida italianización de Ferrari de la era post-shoesmaker.

Situación a perpetuidad hasta que un verdadero Mateschitz de turno le patee el culo a este par de soplagaitas para conducir Ferrari con la diligencia que se le presupone al mas grande equipo de la F1.