02-04-2014, 15:19
El motor, quebradero de una escudería que da casi por perdidas las dos próximas carreras
Ferrari pide más tiempo
Fernando Alonso espera a un cambio de neumáticos durante el GP de Malasia
La palabra de moda en Ferrari es confianza. Ante el discreto inicio de temporada, con dos cuartos puestos de Alonso como mejor resultado y la sensación de estar a kilómetros de distancia del Mercedes, la escudería italiana ha echado mano de los protocolos habituales para poner en valor el trabajo de sus ingenieros. El equipo rojo reclama tranquilidad a sus seguidores porque tienen detectado el principal problema que les ha alejado de los podios, un motor poco eficiente al que todavía hay que afinar para sacarle su mejor música.
Alonso fue transparente nada más bajarse del monoplaza en Malasia. Al coche le falta velocidad punta y también falta de tracción a la salida de las curvas lentas. Es decir, la entrega de potencia del motor no está lograda. Algunas fuentes hablan de una desventaja de entre 60 y 100 caballos respecto al propulsor de Mercedes. Una barbaridad. Es a ese campo al que Ferrari dirigirá la mayor parte de sus esfuerzos en las próximas semanas con un objetivo claro: remontar la desventaja con Mercedes y Red Bull para el comienzo de la campaña europea, el próximo 11 de mayo en el circuito de Barcelona durante el GP de España.
Antes de eso, en las carreras de este fin de semana en Bahréin y en la próxima de China (20 de abril), Ferrari tendrá que correr «a la defensiva», minimizando daños. Al estilo de estas últimas temporadas, cuando el dominio de Red Bull era más abrumador. Para Alonso será vital sumar la mayor cantidad de puntos posibles y evitar que sus rivales tomen una ventaja irrecuperable en la clasificación. Por fortuna, el español es un experto en eso. Son ya muchos años esprintando desde atrás para luchar por la victoria.
Más desafíos
Pero el escaso desempeño de su unidad de potencia no es el único quebradero de cabeza para Ferrari. En Maranello han localizado otras dos carencias importantes que explican la distancia con los mejores. En primer lugar, el consumo de su motor es superior al de alguno de sus rivales, por encima de lo que habían calculado durante los test de pretemporada. Este año, con la limitación de 100 kilos de combustible, un consumo excesivo obliga a reducir el ritmo en determinadas fases de la carrera para evitar ser sancionados, por lo que se trata de un aspecto fundamental. Por otro lado, la degradación de los neumáticos en Malasia, en una situación de humedad extrema y altísimas temperaturas, tampoco fue la deseable. Ahí el problema es mecánico.
Para Bahréin pocos dudan que Mercedes volverá a llevar la voz cantante. El Mundial viaja a un escenario en el que los equipos ya pudieron probar durante la pretemporada, y donde fueron dominantes las escuderías propulsadas por el motor germano, siempre con Rosberg y Hamilton al frente. Ese dominio también lo espera Alonso, que ayer habló para los medios oficiales de su equipo: «Será una carrera dura para todos, sin lugar a dudas. Vimos cómo de exigente es el circuito cuando fuimos en febrero y cuántos problemas experimentaron todos. Sabemos que tenemos una dura competencia con Mercedes, Red Bull y algunos equipos punteros, e intentaremos mejorar, subir nuestro nivel y tener un buen fin de semana».
Áreas mejorables
Motor: La unidad de potencia del Ferrari es, por ahora, el gran lastre. El equipo italiano tiene mucho trabajo que hacer aún en este campo.
Consumo: La escudería italiana no es la peor en ese sentido, pero aún debe optimizar el gasto de combustible para ser más competitiva.
Neumáticos: La degradación de las ruedas durante el GP de Malasia fue mayor de lo esperado, lo que perjudicó las opciones de Alonso y Raikkonen.
http://www.abc.es/deportes/f1/20140402/a...12315.html
Ferrari pide más tiempo
Fernando Alonso espera a un cambio de neumáticos durante el GP de Malasia
La palabra de moda en Ferrari es confianza. Ante el discreto inicio de temporada, con dos cuartos puestos de Alonso como mejor resultado y la sensación de estar a kilómetros de distancia del Mercedes, la escudería italiana ha echado mano de los protocolos habituales para poner en valor el trabajo de sus ingenieros. El equipo rojo reclama tranquilidad a sus seguidores porque tienen detectado el principal problema que les ha alejado de los podios, un motor poco eficiente al que todavía hay que afinar para sacarle su mejor música.
Alonso fue transparente nada más bajarse del monoplaza en Malasia. Al coche le falta velocidad punta y también falta de tracción a la salida de las curvas lentas. Es decir, la entrega de potencia del motor no está lograda. Algunas fuentes hablan de una desventaja de entre 60 y 100 caballos respecto al propulsor de Mercedes. Una barbaridad. Es a ese campo al que Ferrari dirigirá la mayor parte de sus esfuerzos en las próximas semanas con un objetivo claro: remontar la desventaja con Mercedes y Red Bull para el comienzo de la campaña europea, el próximo 11 de mayo en el circuito de Barcelona durante el GP de España.
Antes de eso, en las carreras de este fin de semana en Bahréin y en la próxima de China (20 de abril), Ferrari tendrá que correr «a la defensiva», minimizando daños. Al estilo de estas últimas temporadas, cuando el dominio de Red Bull era más abrumador. Para Alonso será vital sumar la mayor cantidad de puntos posibles y evitar que sus rivales tomen una ventaja irrecuperable en la clasificación. Por fortuna, el español es un experto en eso. Son ya muchos años esprintando desde atrás para luchar por la victoria.
Más desafíos
Pero el escaso desempeño de su unidad de potencia no es el único quebradero de cabeza para Ferrari. En Maranello han localizado otras dos carencias importantes que explican la distancia con los mejores. En primer lugar, el consumo de su motor es superior al de alguno de sus rivales, por encima de lo que habían calculado durante los test de pretemporada. Este año, con la limitación de 100 kilos de combustible, un consumo excesivo obliga a reducir el ritmo en determinadas fases de la carrera para evitar ser sancionados, por lo que se trata de un aspecto fundamental. Por otro lado, la degradación de los neumáticos en Malasia, en una situación de humedad extrema y altísimas temperaturas, tampoco fue la deseable. Ahí el problema es mecánico.
Para Bahréin pocos dudan que Mercedes volverá a llevar la voz cantante. El Mundial viaja a un escenario en el que los equipos ya pudieron probar durante la pretemporada, y donde fueron dominantes las escuderías propulsadas por el motor germano, siempre con Rosberg y Hamilton al frente. Ese dominio también lo espera Alonso, que ayer habló para los medios oficiales de su equipo: «Será una carrera dura para todos, sin lugar a dudas. Vimos cómo de exigente es el circuito cuando fuimos en febrero y cuántos problemas experimentaron todos. Sabemos que tenemos una dura competencia con Mercedes, Red Bull y algunos equipos punteros, e intentaremos mejorar, subir nuestro nivel y tener un buen fin de semana».
Áreas mejorables
Motor: La unidad de potencia del Ferrari es, por ahora, el gran lastre. El equipo italiano tiene mucho trabajo que hacer aún en este campo.
Consumo: La escudería italiana no es la peor en ese sentido, pero aún debe optimizar el gasto de combustible para ser más competitiva.
Neumáticos: La degradación de las ruedas durante el GP de Malasia fue mayor de lo esperado, lo que perjudicó las opciones de Alonso y Raikkonen.
http://www.abc.es/deportes/f1/20140402/a...12315.html