31-10-2016, 09:16
Buenos días,
No encuentro razones para seguir viendo la F1 una vez que se decida este campeonato. Con todo mi dolor.
Convergen al menos 4 factores, y no creo que sea casualidad:
1. Falta de emoción por las victorias. Desde 2009 una escudería domina incontestablemente. El campeonato se decide en Australia y en las carreras lo habitual es lo visto hoy en la cabeza en este GP de México: irse en la salida y ganar. No hay finales con emoción por la victoria.
2. La F1 de niñatos maleducados: Vettel, Verstappen, Hamilton... Manipulación de normas, interpretaciones descaradamente interesadas y adición artificial de emoción mediante sanciones (la que no logran deportivamente).
3. Una complejidad técnica que solo sirve para dejarnos a algunos con cara de bobos. Es imposible entender mínimamente estos motores, frenos, comportamiento de neumáticos, etc. Una complejidad, nuevamente artificial, que no se corresponde con un aumento de emoción y espectáculo.
4. Fernando Alonso: solo hay que oírlo por la radio para deducir su estado de ánimo: "...un coche que no debería estar en carrera. Haced vuestro trabajo que yo hago el mío". No me extraña, son ya 10 años de desazón. No es este el final que merece, peleando por adelantar a Palmer que lleva un Renault con 70 vueltas de neumáticos. Es imposible que Alonso se imaginara algo así cuando se fue con ellos a finales de 2014.
Lo dicho, antes me veía todos los previos, libres, calificación... ayer vi la carrera y a mitad de la misma estaba deseando que acabase de lo que me aburría. Lo único que mantiene medianamente vivo el interés es leer foros y redes de aficionados como vosotros.
Saludos.
No encuentro razones para seguir viendo la F1 una vez que se decida este campeonato. Con todo mi dolor.
Convergen al menos 4 factores, y no creo que sea casualidad:
1. Falta de emoción por las victorias. Desde 2009 una escudería domina incontestablemente. El campeonato se decide en Australia y en las carreras lo habitual es lo visto hoy en la cabeza en este GP de México: irse en la salida y ganar. No hay finales con emoción por la victoria.
2. La F1 de niñatos maleducados: Vettel, Verstappen, Hamilton... Manipulación de normas, interpretaciones descaradamente interesadas y adición artificial de emoción mediante sanciones (la que no logran deportivamente).
3. Una complejidad técnica que solo sirve para dejarnos a algunos con cara de bobos. Es imposible entender mínimamente estos motores, frenos, comportamiento de neumáticos, etc. Una complejidad, nuevamente artificial, que no se corresponde con un aumento de emoción y espectáculo.
4. Fernando Alonso: solo hay que oírlo por la radio para deducir su estado de ánimo: "...un coche que no debería estar en carrera. Haced vuestro trabajo que yo hago el mío". No me extraña, son ya 10 años de desazón. No es este el final que merece, peleando por adelantar a Palmer que lleva un Renault con 70 vueltas de neumáticos. Es imposible que Alonso se imaginara algo así cuando se fue con ellos a finales de 2014.
Lo dicho, antes me veía todos los previos, libres, calificación... ayer vi la carrera y a mitad de la misma estaba deseando que acabase de lo que me aburría. Lo único que mantiene medianamente vivo el interés es leer foros y redes de aficionados como vosotros.
Saludos.
Confiando en El Plan.