23-05-2011, 08:49
«He nacido testarudo»
El asturiano no se da por vencido a pesar de los 67 puntos de desventaja ante el líder, el alemán Vettel
Barcelona, Álvaro FAES
Arropado por su familia al completo (nada más que le faltó en Montmeló su hermana) y uno de sus amigos más íntimos; con los aficionados volcados y convencidos de que su aliento empuja el Ferrari, y con la duda de si las mejoras que habían traído les iban a acercar un poco más a los Red Bull, Fernando Alonso encaró el fin de semana decidido a demostrar lo que ya no necesita demostrar. Que hay piloto. Y que estará ahí, a la espera de que el coche dé señales de vida. Abrazado a la Scuderia de por vida, el horizonte de 2016 como final de su recién estrenado contrato le pone cerca de los títulos. Cuándo será es otra historia, pero que en Ferrari los estará rondando entra en el mundo de lo lógico.
El piloto está convencido, y se lo repite a quien lo quiere escuchar, de que está en el mejor sitio para conseguir el tercero. Pudo ser nada más llegar, pero el sueño se volvió drama en el último momento. Y si no llega este año, tendrá todavía cinco temporadas para intentarlo. No tiene prisa. Vive una luna de miel perpetua con Ferrari. Le gusta el ambiente, se siente querido, comprendido y respetado. El nirvana para un piloto.
Del líder Vettel le separan 67 puntos. Tiene el alemán ya cuatro victorias y el campeonato del año pasado lo logró con cinco. Pero Alonso, persistente, cree que todavía está a tiempo de reaccionar. «Por suerte o por desgracia, he nacido testarudo y sigo pensando que todavía queda margen, siempre y cuando tenga un buen coche y pueda tratarles de tú a tú (a Red Bull y McLaren). Ahora mismo no es así, pero queda mucho y vienen pistas como Canadá y Valencia que pueden darnos una buena medida de lo que será el coche. Ahí quedará marcada la temporada y sabremos ya si no podemos alcanzarles o si nos ponemos a la par».
Alonso lideró la carrera durante dieciocho vueltas. Diseñó una salida de tiralíneas y se comió a todos los rivales. Luego rodó un buen rato tercero, hasta que el Ferrari no aguantó más. Pero mientras el público vibraba con el asturiano volador, él sabía que su aventura tenía fecha de caducidad y que sería antes de la línea de meta. «Es frustrante hacer el sábado una vuelta estupenda y no pasar del cuarto. También ir líder en las primera veinte vueltas y saber que no vas a estar en el podio. Y claro, que te doblen al final no es mucho mejor», reconoció Alonso.
Fue a una vuelta del final, cuando Vettel y Hamilton le pasaron camino de la línea de meta. «Doblar al quinto tampoco es muy normal. Eso demuestra el carrerón que hicieron ellos». Alonso no pasó por alto el pobre rendimiento de Felipe Massa. Lo aprovechó para destacar su papel. «Cuando no puedes competir con los mejores intentas medirte con tu compañero. Intento batirle en la crono y lo he conseguido las cinco veces. También lo intento en la carrera», dijo el asturiano.
Felipe Massa ni se revolvió, consciente de su mala carrera. «Esta vez Fernando ha sido mejor que yo todo el fin de semana», dijo cuando le hicieron ver que, en las situaciones negativas, el español consigue mejor rendimiento del coche. Ni siquiera acudió a sus mejores resultados en China y en Malasia. Simplemente, claudicó.
LNE
PD. Y con un par...! (Añado yo, recuperándome de vivir in situ la magia de sus manos al volante y la desilusión de ver un coche q no le llega a la suela del zapato de su piloto )
El asturiano no se da por vencido a pesar de los 67 puntos de desventaja ante el líder, el alemán Vettel
Barcelona, Álvaro FAES
Arropado por su familia al completo (nada más que le faltó en Montmeló su hermana) y uno de sus amigos más íntimos; con los aficionados volcados y convencidos de que su aliento empuja el Ferrari, y con la duda de si las mejoras que habían traído les iban a acercar un poco más a los Red Bull, Fernando Alonso encaró el fin de semana decidido a demostrar lo que ya no necesita demostrar. Que hay piloto. Y que estará ahí, a la espera de que el coche dé señales de vida. Abrazado a la Scuderia de por vida, el horizonte de 2016 como final de su recién estrenado contrato le pone cerca de los títulos. Cuándo será es otra historia, pero que en Ferrari los estará rondando entra en el mundo de lo lógico.
El piloto está convencido, y se lo repite a quien lo quiere escuchar, de que está en el mejor sitio para conseguir el tercero. Pudo ser nada más llegar, pero el sueño se volvió drama en el último momento. Y si no llega este año, tendrá todavía cinco temporadas para intentarlo. No tiene prisa. Vive una luna de miel perpetua con Ferrari. Le gusta el ambiente, se siente querido, comprendido y respetado. El nirvana para un piloto.
Del líder Vettel le separan 67 puntos. Tiene el alemán ya cuatro victorias y el campeonato del año pasado lo logró con cinco. Pero Alonso, persistente, cree que todavía está a tiempo de reaccionar. «Por suerte o por desgracia, he nacido testarudo y sigo pensando que todavía queda margen, siempre y cuando tenga un buen coche y pueda tratarles de tú a tú (a Red Bull y McLaren). Ahora mismo no es así, pero queda mucho y vienen pistas como Canadá y Valencia que pueden darnos una buena medida de lo que será el coche. Ahí quedará marcada la temporada y sabremos ya si no podemos alcanzarles o si nos ponemos a la par».
Alonso lideró la carrera durante dieciocho vueltas. Diseñó una salida de tiralíneas y se comió a todos los rivales. Luego rodó un buen rato tercero, hasta que el Ferrari no aguantó más. Pero mientras el público vibraba con el asturiano volador, él sabía que su aventura tenía fecha de caducidad y que sería antes de la línea de meta. «Es frustrante hacer el sábado una vuelta estupenda y no pasar del cuarto. También ir líder en las primera veinte vueltas y saber que no vas a estar en el podio. Y claro, que te doblen al final no es mucho mejor», reconoció Alonso.
Fue a una vuelta del final, cuando Vettel y Hamilton le pasaron camino de la línea de meta. «Doblar al quinto tampoco es muy normal. Eso demuestra el carrerón que hicieron ellos». Alonso no pasó por alto el pobre rendimiento de Felipe Massa. Lo aprovechó para destacar su papel. «Cuando no puedes competir con los mejores intentas medirte con tu compañero. Intento batirle en la crono y lo he conseguido las cinco veces. También lo intento en la carrera», dijo el asturiano.
Felipe Massa ni se revolvió, consciente de su mala carrera. «Esta vez Fernando ha sido mejor que yo todo el fin de semana», dijo cuando le hicieron ver que, en las situaciones negativas, el español consigue mejor rendimiento del coche. Ni siquiera acudió a sus mejores resultados en China y en Malasia. Simplemente, claudicó.
LNE
PD. Y con un par...! (Añado yo, recuperándome de vivir in situ la magia de sus manos al volante y la desilusión de ver un coche q no le llega a la suela del zapato de su piloto )
" creo que he pasado toda mi vida, los nueve últimos años de mi carrera en la Fórmula 1 preparándome para este momento, para estar listo. Al fin ha llegado." Fernando Alonso (30/09/09)