29-09-2010, 12:00
(Este mensaje fue modificado por última vez en: 29-09-2010, 12:01 por ENRIVER.)
Del pasado no se vive y el deporte no es una excepción. El heptacampeón del mundo de Fórmula 1 vive sus peores horas en el Gran Circo. En el paddock corre el rumor de que Mercedes podría prescindir tanto del Kaiser como del jefe de la escudería, Ross Brawn, en los próximos días.
La apuesta de la marca alemana fue importante en todos los sentidos. Compraron una escudería (Brawn GP) en plena crisis económica y los resultados no terminan de llegar. Ni Schumacher, que regresó tras tres años sabáticos, como Rosberg (sólo tres podios) están cumpliendo con lo que se esperaba de ellos a comienzo de temporada.
Desde la propia Mercedes se sabía que sería difícil luchar por el título mundial, pero sí esperaban estar en la pelea por las victorias. Por este motivo ahora vienen a la memoria de todos las palabras del director deportivo de Mercedes, Nobert Haug, en verano, en las que ya advirtió que si no se lograban los objetivos marcados habría cambios en la estructura de la escudería.
Sin embargo, y para frenar estos desestabilizadores rumores, tanto Haug como Brawn han querido zanjar esta polémica. Haug ha dejado claro que "el trabajo para el futuro va bien. He oído rumores sobre Michael, sobre mí y sobre Ross. Mi respuesta es no: no hay grietas en la relación", señaló de manera contundente Haug al término del Gran Premio de Singapur. En estos mismos términos se ha pronunciado Ross Brawn en Autosport. "No hay ningún problema entre Norbert (Haug) y yo. Ambos estamos descontentos con los resultados que hemos conseguido, pero ambos trabajamos juntos y así sólo podemos tener éxito".
Ahora sólo hay que ver si, como en el fútbol, la confirmación es el paso previo al despido.
FUENTE: Eurosport
La apuesta de la marca alemana fue importante en todos los sentidos. Compraron una escudería (Brawn GP) en plena crisis económica y los resultados no terminan de llegar. Ni Schumacher, que regresó tras tres años sabáticos, como Rosberg (sólo tres podios) están cumpliendo con lo que se esperaba de ellos a comienzo de temporada.
Desde la propia Mercedes se sabía que sería difícil luchar por el título mundial, pero sí esperaban estar en la pelea por las victorias. Por este motivo ahora vienen a la memoria de todos las palabras del director deportivo de Mercedes, Nobert Haug, en verano, en las que ya advirtió que si no se lograban los objetivos marcados habría cambios en la estructura de la escudería.
Sin embargo, y para frenar estos desestabilizadores rumores, tanto Haug como Brawn han querido zanjar esta polémica. Haug ha dejado claro que "el trabajo para el futuro va bien. He oído rumores sobre Michael, sobre mí y sobre Ross. Mi respuesta es no: no hay grietas en la relación", señaló de manera contundente Haug al término del Gran Premio de Singapur. En estos mismos términos se ha pronunciado Ross Brawn en Autosport. "No hay ningún problema entre Norbert (Haug) y yo. Ambos estamos descontentos con los resultados que hemos conseguido, pero ambos trabajamos juntos y así sólo podemos tener éxito".
Ahora sólo hay que ver si, como en el fútbol, la confirmación es el paso previo al despido.
FUENTE: Eurosport