31-10-2012, 00:52
(Este mensaje fue modificado por última vez en: 31-10-2012, 01:57 por Alano_Spanol.)
(30-10-2012, 13:27)bayoneta escribió:(30-10-2012, 12:22)susa escribió: a mi es lo que me parece. Ferrari con problemas y guerras internas que nada tienen que ver con la competición en si, y lo más triste es queda prensa española, algún buitre, los mezquinos que no llevan que Alonso sea el piloto más grande de la actual F1, enmerdando tras una carrera increible de Alonso. Ayer había artículos preciosos dedicados a Alonso.
Aun siguen habiendolos por eso en este la gazzetta dello sport hace un pequeño resumen actual y habla sobre la posible llegada de Vettel a Ferrari,
Articulo de La gazzetta dello sport 30-10-21012
Fernando che non molla
PINO ALLIEVI
Il karma di Alonso: una carriera a inseguire
È il più completo e ha vinto 2 titoli senza mai avere l’auto migliore. Con Vettel è guerra sul futuro e se arrivasse...
Inseguire è il suo destino. Lo ha sempre fatto. Alonso ha conquistato due Mondiali e vinto 30 gran premi quasi sempre con mezzi inferiori agli avversari.
È stato così ai tempi Renault, la storia si sta ripetendo con la Ferrari.
La maledizione di dover rischiare il doppio dei rivali.
Accadeva quando doveva battersi con la Ferrari superiore di Schumacher.
Succede anche ora che sulla rossa c’è lui e ogni impresa—come domenica in India, coronata da un secondo posto che vale
quanto un primo—ha un prezzo ben più alto delle cavalcate solitarie dei piloti Red Bull.
Un destino, appunto. Con la Ferrari che sta facendo i miracoli,
da anni, per dargli il massimo senza riuscirci.
Ritardo Nel 2010 fa sembrava fatta e poi venne l’erroraccio ai box di Abu Dhabi a cancellare il sogno: non fu colpa sua.
Poi altre due stagioni di sforzi sovraumani per portare il Cavallino a lottare alla pari o quasi con la Red Bull.
La Ferrari recupera, i progressi dell’India rispetto alla Corea sono evidenti.
Ma la Red Bull va oltre e la distanza resta inalterata. Purtroppo per Fernando.
Il quale più passa il tempo più tende pervicacemente a distinguere le responsabilità, sottolineando come «da 5-6 gran premi» la Ferrari non ce la faccia a dargli quello di cui lui avrebbe bisogno.
Ossia un maggior carico aerodinamico per tenere la macchina incollata a terra.
È questo il motivo per cui in tante occasioni le sue corse diventano azzardi, rispetto alla rassicurante sicurezza con cui
Vettel guida la Red Bull.
Futuro Ma c’è un altro discorso legato a Vettel. Sottile, insidioso, tagliente.
Si sa che dall’autunno 2011 esiste qualcosa che lega Vettel a Maranello. Non un contratto vero e proprio, quanto un’intesa per portare il campione tedesco a condurre la Ferrari nel 2014. O al massimo nel 2015.
I termini sono noti solo al pilota, oltre che a Montezemolo e Domenicali.
E il fatto che per il 2013 si sia cercato qualcuno disposto a firmare per un solo anno
(poi si è optato per la soluzione indolore Massa) lo dimostra.
Altrimenti si sarebbe bloccato Lewis Hamilton. O si sarebbe tentato di avere subito Jenson Button.
Guerriglia Dinanzi a questa prospettiva, Alonso per un po’ ha sorvolato, poi ha cominciato la sua guerra psicologica
preventiva a Sebastian. Come? Escludendolo a esempio con puntualità dai suoi favoriti
per il titolo, tanto da indicare— sin quando è stato possibile — Hamilton come maggior pretendente.
Aggiungendo come nessuno sia bravo quanto Lewis, col quale si odiava sino a ieri l’altro.
Poi sono cominciate le schermaglie in pista. E Monza, quando Vettel ha fatto mettere pericolosamente
due ruote nell’erba ad Alonso al velocissimo Curvone, ha acceso la miccia.
Proseguita a Suzuka, dove Alonso in qualifica si è lamentato di Vettel che non gli ha dato strada e ha spinto poi
la Ferrari a cercare una punizione per Sebastian. Infine la battutaccia sprezzante alla vigilia
di Nuova Delhi, quando Fernando ha spiegato come lui si batta «contro Adrian Newey»: ovvero il pilota delle
macchine del genio inglese è secondario.
Nervosismo é un Alonso insofferente, tormentato, per nulla allegro, che mentre offre dimostrazioni di bravura rare in
F.1, pensa al domani, a chi potrebbe essergli accanto rovinando gli equilibri che lui ha creato a Maranello.
Dove intende restare perché si trova benissimo. Ma alle sue condizioni.
Alonso è un grande professionista dalla testa gelida, capace di smontare una situazione in un baleno.
Quando capì che la McLaren sosteneva più Hamilton di lui, in un istante ruppe un contratto che doveva
proseguire per altri due anni e tornò alla più modesta Renault. Guai a ferirlo.
O io o Seb Nel momento migliore della sua carriera sta dando tutto alla Ferrari per conquistare il titolo, però sta anche cercando di dimostrare come una convivenza con Sebastian sarebbe difficile e rischiosa.
Lo fa col suo linguaggio, inviando messaggi subliminali e non. Chi conosce le situazioni decifra facilmente.
Il titolo mondiale conquistato con una Ferrari inferiore lo aiuterebbe.
Ma anche se non arrivasse, ha già dimostrato che il pilota numero 1, oggi, è indiscutibilmente lui.
Poi la Ferrari, per il futuro, faccia quello che vuole: Fernando si regolerà di conseguenza.
Sapendo che, nel caso, si libererà un posto alla Red Bull…
Ok. Traduzione per tutti...
Fernando no se rinde | PINO ALLIEVI
El karma de Alonso; una carrera para seguir. (perseguir)
Es el más completo y ganó dos títulos sin tener el mejor coche mejor. Con Vettel es la guerra del futuro y si llegase...
Perseguir es su destino. Siempre lo ha hecho. Alonso ha conquistado dos Mundiales y ha vencido en 30 Grandes Premios, casi siempre con medios inferiores a los de los rivales.
Fue así en el tiempo de Renault, y la historia se está repitiendo con Ferrari.
La maldición de tener que arriesgar el doble que los rivales. Sucedió cuando tenía que luchar con la Ferrari superior de Schumacher.
Sucede incluso ahora que él está en la Scudería Rossa y la lleva impresa -como el Domingo en la India,
coronada por un segundo puesto que vale como un primero-, tiene un (a)precio más alto que la cabalgada en solitario del piloto de Red Bull.
Un (su) destino, por cierto. Con la Ferrari está haciendo los milagros, de años, por darle el máximo sin éxito.
Al final de 2010, las cosas parecían estar hechas y luego vino el erroraccio (errorazo) del Box en Abu Dhabi para cancelar el sueño: no fue su culpa.
Después de dos temporadas más, de esfuerzo sobrehumano para llevar al Caballino a luchar a la par o casi por igual,
con la Red Bull. Ferrari recupera, el progreso de la India en comparación con Corea son evidentes.
Pero la Red Bull va más allá y la distancia sigue siendo la misma. Desafortunadamente para Fernando.
Cuanto más tiempo pasa, más obstinadamente tiende a distinguir responsabilidades, señalando que "-desde- cinco-seis carreras»
Ferrari no lo hacen para darle lo que quisiera, lo que necesita.
Es decir, una mayor carga aerodinámica para mantener la máquina pegada al suelo. Esta es la razón por la que tantas veces se convierten sus viajes (pilotaje) en riesgos,
en comparación con la certeza tranquilizadora con la que Vettel lleva el Red Bull. Pero el futuro, está (aparece) otro asunto relacionado con Vettel. Sutil, insidioso, agudo.
Se sabe que desde el otoño de 2011, hay algo que une a Vettel en Maranello. No es un contrato real, un acuerdo para llevar,el campeón alemán en la Ferrari en 2014.
O a más tardar en 2015. Los términos son conocidos solamente por el piloto, así como por Montezemolo y Domenicalli.
Y el hecho de que para el año 2013 hayan estado buscando a alguien dispuesto para inscribirse por un solo año (Entonces se ha optado por la solución indolora de Massa) lo demuestra.
Al contrario, se sabe del bloqueo a Lewis Hamilton. O se sabe de haber tentado a Jenson Button.
Guerrilla ante esta perspectiva, Alonso por un tiempo sobrevoló, y luego comenzó su guerra psicológica hacia Sebastian (Vettel). ¿Cómo?
Exluyéndolo, por ejemplo, con puntualidad de sus favoritos para el título, así como para señalar -sin cuando era posible- a Hamilton como un competidor importante.
Agregando que nadie es tan bueno como Lewis, con quien se odiaba hasta ayer. Entonces empezaron las escaramuzas en la pista.
En Monza, cuando Vettel hizo llevar peligrosamente con dos ruedas a la hierba a Alonso, en el velocísimo Curvone, encendió la mecha.
Continuó en Suzuka, donde Alonso en la clasificación se quejó de Vettel, que no cedió y luego empujó a Ferrari a buscar castigo para Sebastian.
Por último, los chistes despectivos en la víspera de Nueva Delhi, cuando Fernando se explica cómo él lucha "contra Adrian Newey"
o como considera que el piloto de las máquinas del (in)genio Inglés es secundario.
El nerviosismo está en un impaciente Alonso, atormentado, no alegre, que al tiempo que ofrece las demostraciones de bravura raras en F1, piensa en el mañana,
en el equilibrio que se crea con él en Maranello, que se estaría arruinando. (Maranello) Dónde tiene la intención de quedarse, ya que está muy bien. Pero en sus términos.
Alonso es un gran profesional de cabeza fría, capaz de desmantelar una situación en un santiamén.
Cuando se dio cuenta de que McLaren sostenía más a Hamilton que a él, en un instante se rompió un contrato que iba a continuar durante otros dos años y volvió a la más modesta Renault. ¡Ay de aquel daño.
O Yo, o Seb. En el mejor momento de su carrera está dando todo a Ferrari por el título, pero busca también demostrar cómo convivir con Sebastian se haría difícil y arriesgado.
Lo hace con su lengua(je), y enviando mensajes subliminales y no. Quién conoce la situación, lo descrifra fácilmente.
El título mundial ganado con una Ferrari inferior lo ayudaría.
Pero incluso si (Vettel) no viene, ya se ha demostrado que el piloto número 1 de hoy, es sin lugar a dudas él.
A continuación, la Ferrari, para el futuro, que haga lo que quiera: Fernando se ajustará en consecuencia.
Sabiendo que, en ese caso, se liberará un puesto en la Red Bull ...
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