06-07-2014, 21:05
Enorme carrera del español que solo le valió para ser sexto. La victoria de Hamilton y el abandono de Rosberg aprietan el Mundial
Fernando Alonso ha vuelto a cruzar los límites de lo imposible en Silverstone en la que sin duda ha sido su mejor carrera del año. Por fin disfrutó el español de un gran premio en el que había motivos para dejarse la piel sobre la pista. Y vaya si lo hizo. Un arranque eléctrico, con seis adelantamientos en apenas cinco vueltas, y un ritmo endiablado durante cincuenta vueltas le devolvieron la sonrisa a la cara tras la debacle en la clasificación del sábado. [Narración: así hemos contado elGP de Gran Bretaña]
Después de una remontada labrada curva a curva el español acabó sexto, superado a última hora por Vettel tras una preciosa batalla de quince vueltas. Puede parecer poco, pero en realidad es mucho. Todo lo que puede dar de sí el español con un Ferrari al que se le notan demasiado las vergüenzas.
Alonso remontó en total diez posiciones. Y pudieron ser más si no hubiera sido sancionado con cinco segundos de penalización por colocarse mal en la parrilla de salida. Sin ese lastre Alonso habría estado en condiciones de pelear el podio.
Al margen del triunfo moral de Alonso, la carrera británica devolvió a lo más alto del podio a Lewis Hamilton después de tres grandes premios de sequía, con Bottas y Ricciardo de acompañamiento. El inglés, sexto en la parrilla, tardó apenas dos vueltas en devorar a todos sus rivales y colocarse a la zaga de Rosberg, sólido líder de la carrera desde la primera vuelta. Después, un fallo en la caja de cambios en el coche del alemán dejó la victoria en bandeja a Hamilton. Su triunfo en casa y el abandono de su compañero aprietan de nuevo la clasificación. Ambos pilotos vuelven a estar separados por solo cuatro puntos. [Así va el Mundual de F1]
La carrera tuvo que pararse por bandera roja después de solo dos vueltas por un grave accidente entre Raikkonen y Masa. El finlandés se salió de la pista en plebna recta y en su regreso perdió el control del monoplaza hasta acabar impactando con el muro. El Ferrari salió rebotado a la pista y a punto estuvo de llevarse por delante al Williams de Massa. Por fortuna, el barsileño reaccionó bien y el golpe solo afectó a su rueda trasera izquierda. Suficiente, en todo caso, par arruinar su carrera número 200 en la F1.
La fuerza del impacto de Raikkonen contra el guardarraíl obligó a detener la carrera durante una hora, el tiempo que tardaron los operarios en reponer el destrozo.
abc.es
Fernando Alonso ha vuelto a cruzar los límites de lo imposible en Silverstone en la que sin duda ha sido su mejor carrera del año. Por fin disfrutó el español de un gran premio en el que había motivos para dejarse la piel sobre la pista. Y vaya si lo hizo. Un arranque eléctrico, con seis adelantamientos en apenas cinco vueltas, y un ritmo endiablado durante cincuenta vueltas le devolvieron la sonrisa a la cara tras la debacle en la clasificación del sábado. [Narración: así hemos contado elGP de Gran Bretaña]
Después de una remontada labrada curva a curva el español acabó sexto, superado a última hora por Vettel tras una preciosa batalla de quince vueltas. Puede parecer poco, pero en realidad es mucho. Todo lo que puede dar de sí el español con un Ferrari al que se le notan demasiado las vergüenzas.
Alonso remontó en total diez posiciones. Y pudieron ser más si no hubiera sido sancionado con cinco segundos de penalización por colocarse mal en la parrilla de salida. Sin ese lastre Alonso habría estado en condiciones de pelear el podio.
Al margen del triunfo moral de Alonso, la carrera británica devolvió a lo más alto del podio a Lewis Hamilton después de tres grandes premios de sequía, con Bottas y Ricciardo de acompañamiento. El inglés, sexto en la parrilla, tardó apenas dos vueltas en devorar a todos sus rivales y colocarse a la zaga de Rosberg, sólido líder de la carrera desde la primera vuelta. Después, un fallo en la caja de cambios en el coche del alemán dejó la victoria en bandeja a Hamilton. Su triunfo en casa y el abandono de su compañero aprietan de nuevo la clasificación. Ambos pilotos vuelven a estar separados por solo cuatro puntos. [Así va el Mundual de F1]
La carrera tuvo que pararse por bandera roja después de solo dos vueltas por un grave accidente entre Raikkonen y Masa. El finlandés se salió de la pista en plebna recta y en su regreso perdió el control del monoplaza hasta acabar impactando con el muro. El Ferrari salió rebotado a la pista y a punto estuvo de llevarse por delante al Williams de Massa. Por fortuna, el barsileño reaccionó bien y el golpe solo afectó a su rueda trasera izquierda. Suficiente, en todo caso, par arruinar su carrera número 200 en la F1.
La fuerza del impacto de Raikkonen contra el guardarraíl obligó a detener la carrera durante una hora, el tiempo que tardaron los operarios en reponer el destrozo.
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No se construirá una nueva era con las armas,sino con las manos que las llevan