18-01-2012, 09:22
Van der Garde, el mejor colocado para ser compañero de Pedro de la Rosa. "En la F1 debería primar el talento antes que el dinero, y en algunos casos no es así", afirma Felipe Massa.
http://www.marca.com/2012/01/17/motor/fo...33149.html
El anuncio del fichaje de Bruno Senna por Williams ha dado la penúltima puntada a la parrilla de Fórmula 1 de 2012. Brasileño por brasileño, Senna hace desaparecer al más veterano y recordman con 19 años en competición como Rubens Barrichello.
Eso salvo que Rubinho encuentre fondos y pelee por el único asiento que aún está en el mercado, el de HRT, que no parece probable. El segundo 'bacquet' en la escudería española junto a Pedro de la Rosa cuesta no menos de 6 millones, y a partir de ahí, cuanto más mejor. El holandés Giedo van der Garde es el mejor colocado y con un gran bolsillo a su lado, el proporcionado por la firma McGregor y los billones de su suegro Marcel Boekhoorn. Pero la lista de aspirantes es larga.
Aunque suene así de crudo, la F1 actual cobra por pilotar en muchos equipos. Siempre ha habido maletines, pero la época actual es mucho más dura. De hecho, excepto los cuatro grandes, en casi todos un piloto corre el riesgo de tener que pagar peaje. ""Pase lo que pase, al menos me queda la tranquilidad de no haber tenido nunca que pagar por pilotar", decía Felipe Massa en Madonna Di Campiglio la semana pasada, "pero en la F1 actual prima más el dinero que el talento, y no debería ser así", subrayó. El caso de Adrian Sutil, que ha cuajado una excepcional temporada en 2011, es un ejemplo de ello.
Y a veces incluso teniendo para el peaje, léase Vitaly Petrov, no hay donde meterlo. El ex piloto de Renault (ahora Lotus) se ha quedado fuera tras la llegada de Kimi Raikkonen y Romain Grosjean, campeón de la GP2, y salvo maniobra desesperada, sólo tiene como destino HRT. Maniobra contra los acuerdos más débiles como puedan ser Glock en Marussia.
Porque el asiento de Trulli en Caterham parece grabado a fuego. Ya intentó Red Bull enviar a Ricciardo allí este invierno, pero tiene tanto blindaje el contrato del italiano que no pudieron cerrar la operación. El resultado final fue la salida de Jaime Alguersuari y Sebastian Buemi de Toro Rosso.
Hasta la calificación del Gran Premio de Australia, en realidad, no se podrá asegurar que la parrilla esté cerrada. Y ni siquiera después, como se ha visto la pasada temporada.
http://www.marca.com/2012/01/17/motor/fo...33149.html
El anuncio del fichaje de Bruno Senna por Williams ha dado la penúltima puntada a la parrilla de Fórmula 1 de 2012. Brasileño por brasileño, Senna hace desaparecer al más veterano y recordman con 19 años en competición como Rubens Barrichello.
Eso salvo que Rubinho encuentre fondos y pelee por el único asiento que aún está en el mercado, el de HRT, que no parece probable. El segundo 'bacquet' en la escudería española junto a Pedro de la Rosa cuesta no menos de 6 millones, y a partir de ahí, cuanto más mejor. El holandés Giedo van der Garde es el mejor colocado y con un gran bolsillo a su lado, el proporcionado por la firma McGregor y los billones de su suegro Marcel Boekhoorn. Pero la lista de aspirantes es larga.
Aunque suene así de crudo, la F1 actual cobra por pilotar en muchos equipos. Siempre ha habido maletines, pero la época actual es mucho más dura. De hecho, excepto los cuatro grandes, en casi todos un piloto corre el riesgo de tener que pagar peaje. ""Pase lo que pase, al menos me queda la tranquilidad de no haber tenido nunca que pagar por pilotar", decía Felipe Massa en Madonna Di Campiglio la semana pasada, "pero en la F1 actual prima más el dinero que el talento, y no debería ser así", subrayó. El caso de Adrian Sutil, que ha cuajado una excepcional temporada en 2011, es un ejemplo de ello.
Y a veces incluso teniendo para el peaje, léase Vitaly Petrov, no hay donde meterlo. El ex piloto de Renault (ahora Lotus) se ha quedado fuera tras la llegada de Kimi Raikkonen y Romain Grosjean, campeón de la GP2, y salvo maniobra desesperada, sólo tiene como destino HRT. Maniobra contra los acuerdos más débiles como puedan ser Glock en Marussia.
Porque el asiento de Trulli en Caterham parece grabado a fuego. Ya intentó Red Bull enviar a Ricciardo allí este invierno, pero tiene tanto blindaje el contrato del italiano que no pudieron cerrar la operación. El resultado final fue la salida de Jaime Alguersuari y Sebastian Buemi de Toro Rosso.
Hasta la calificación del Gran Premio de Australia, en realidad, no se podrá asegurar que la parrilla esté cerrada. Y ni siquiera después, como se ha visto la pasada temporada.